¿Cómo puede ajustar su estilo de comunicación para conectarse mejor con los socios surcoreanos?

1 Saludar con respeto

La primera impresión es muy importante en la cultura surcoreana, por lo que debes saludar a tus parejas con respeto y formalidad. Usa sus títulos y apellidos, no sus nombres de pila, a menos que te inviten a hacerlo. Inclínate ligeramente cuando te encuentres con él y ofrécele un apretón de manos firme si lo inicia. Intercambia las tarjetas de presentación con ambas manos y estúdialas cuidadosamente antes de guardarlas. Evite el contacto visual, ya que puede ser visto como grosero o agresivo.

2 Habla con humildad

Los surcoreanos valoran la humildad y la modestia, por lo que debes evitar presumir o exagerar tus logros o habilidades. En su lugar, muestre gratitud y aprecio por las contribuciones y comentarios de sus socios. Usa un lenguaje educado y formal, y evita la jerga, los chistes o el sarcasmo. Escucha con atención y paciencia, y no interrumpas ni contradigas a tus parejas. Utiliza el silencio como señal de respeto y reflexión, no de incomodidad o desacuerdo.

3 Negocia con paciencia

Negociar con los socios surcoreanos puede llevar mucho tiempo, ya que prefieren generar confianza y una buena relación antes de tomar decisiones. No los apresures ni los presiones, ya que pueden verlo como una falta de respeto o agresividad. Esté preparado para proporcionar información detallada y evidencia para respaldar sus propuestas, y sea flexible y esté dispuesto a comprometerse. Respete la jerarquía y la autoridad de sus socios, y aborde cualquier problema o inquietud con la persona superior a cargo.

5 Presente con confianza

Cuando presente sus ideas o productos a sus socios surcoreanos, debe tener confianza, estar preparado y ser profesional. Use ayudas visuales, como diapositivas, tablas o gráficos, para ilustrar sus puntos y proporcione folletos o folletos como referencia. Habla despacio y con claridad, y usa un lenguaje sencillo y directo. Evite los chistes, las anécdotas o las historias personales, ya que pueden no ser relevantes o apropiadas. Anticípate a las preguntas y objeciones, y respóndelas de manera educada y diplomática.