Psicóloga Laboral y Lic. en Educación Cs Pedagógicas /Especialista de Formación y DO/Magíster en Desarrollo Organizacional/Coach ICC-ICF/ Agile Coach y Agile Coach para RRHH
El conocimiento, entendido como la información, habilidades y experiencia acumuladas por individuos y organizaciones, es un recurso esencial en la sociedad actual. Como es un intangible, tiene varias implicancias: 👉 Dificultad de valoración: Es complicado medir y valorar económicamente el conocimiento, ya que no tiene una forma física y su valor puede variar según el contexto y su aplicación. 👉 Transferencia y replicabilidad: El conocimiento se puede compartir y replicar sin perder su valor original, lo que permite su amplia difusión y utilización en diferentes lugares y contextos. 👉 Propiedad intelectual: La naturaleza intangible del conocimiento plantea desafíos en términos de protección y derechos de autor, lo que puede complicar la gestión de la propiedad intelectual. 👉 Innovación y competitividad: El conocimiento es fundamental para la innovación y puede ser una ventaja competitiva crucial para individuos, organizaciones y países. 👉 Acceso y desigualdad: La distribución del conocimiento puede ser desigual, lo que contribuye a brechas de acceso y oportunidades, afectando el desarrollo y la equidad social. 👉 Dependencia de la tecnología: La gestión y distribución del conocimiento a menudo dependen de la tecnología, lo que puede limitar su acceso en regiones con infraestructura tecnológica deficiente. 👉 Evolución constante: El conocimiento está en constante evolución, lo que requiere un aprendizaje continuo y adaptación para mantenerse actualizado y hoy por hoy esto es especialmente cierto con el avance de las TIC. En las organizaciones, el conocimiento se transmite hoy a través de diversas herramientas y prácticas, como la gestión del conocimiento (knowledge management), plataformas de colaboración en línea, bases de datos compartidas, formación continua y mentoring. Estas prácticas facilitan el flujo de información y habilidades, permitiendo a las organizaciones adaptarse rápidamente a los cambios y mejorar su desempeño. Como señala Drucker, "el conocimiento se ha convertido en el recurso económico más importante, más que la tierra, el trabajo o el capital" (Drucker, 1993). Esto subraya la importancia de gestionar adecuadamente este recurso intangible.