Evolucionamos todos.
Hace 25 años Julia se presentó a un llamado en una empresa. El cargo era para Coordinador de un área. Luego de pasar por el proceso y avanzar en las diversas etapas, Julia es contactada por el director de la empresa quien le va a dar una devolución del proceso.
Roberto: "Julia, fuiste finalista del proceso. Te tengo que decir que no quedaste en este llamado. Pero quiero hacerte una nueva propuesta".
Julia: "Bueno"
Roberto: "Primero te quiero decir porque no quedaste en el proceso de Coordinador. Fueron dos los motivos. El primero de ellos porque no tenes experiencia y contactos que permitan desarrollar este plan".
Julia con 19 años, podía aceptarlo y pensó "tiene razón"
Roberto: "El segundo motivo, es que no eres hombre".
Julia con 19 años, pensó: "Me hiciste perder el tiempo. No cambié de sexo en el transcurso del proceso".
Roberto continuó su exposición y finalmente le ofreció otra posición a Julia, quien luego de pensarlo unos días la aceptó y se puso a manos a la obra a trabajar.
Pasaron los años y Julia y Roberto se hicieron amigos. Un día Julia, ya 20 años después le dice a Roberto.
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Julia: ¿Te acordas lo que me dijiste cuando no quedé en el cargo?
Cuando Roberto le responde que no recordaba, Julia le comenta la charla. Ante lo cual Roberto le dice:
"¡Qué bestia! ¿Yo no era padre todavía verdad? Mi concepción del mundo cambió cuando entré a la sala de parto".
Todos evolucionamos. Roberto en su valoración de las personas más allá de su género. Y Julia, que entendió que no solo había perdido el tiempo sino que había sido discriminada. Algunas cosas se ven más claras, cuando pasado el tiempo dejas de normalizar algunas situaciones.
Igualmente, lo importante de esto es que todos evolucionamos y crecemos como personas. Se puede cambiar de idea, adoptar nuevas formas y avanzar como seres humanos; y así construir relaciones que miran para adelante.
Este caso, si bien destaca un hecho de #discriminación. También habla de #evolución #crecimiento #mentalidadabierta y #construcción de un vínculo no solo profesional. Tenemos la posibilidad de evolucionar, pero para eso, se necesita perdonar, mirar para adelante y crecer, para así llegar a un mejor lugar.
Fin.
Autor: Lucía Malián