Hoy quiero compartiles algo que seguramente no sabían de mi.
En el 2012 a mis 22 decidí empezar mi primer startup.
Comparto la edad porque creo es relevante en esta historia, principalmente por la ingenuidad, cero experiencia y la sobre confianza en mi mismo con la que aborde ese reto.
ME EQUIVOQUE EN ABSOLUTAMENTE TODO. #leccionesdelfracaso
👉 Debí escuchar y aplicar lo aprendido por otros.
👉 Ignore todas las buenas prácticas by the book.
Y en verdad fue porque pensé que yo era diferente, y que me tocaba desafiar lo desconocido.
Las startups en LatAm no eran algo común, por ende iniciar una compañía pensé que había que hacerlo distinto.
En ese momento no había el ecosistema de hoy en LatAm.
Pero la realidad es que si me pude haber leido varios libros de experiencias de startups en otras regiones como Silicon Valley y partir con mejores probabilidades.
¿Qué hice mal?
TODO.
Me da un poco de pena por lo evidente del error, pero aquí van un par.
❌ Producto/MVP
Nunca lanzamos. Cuál ingenieros que eramos, construimos producto sin parar, y nunca estaba lo suficientemente listo. Mi visión era un producto completo y complejo.
Nunca se nos ocurrió que podíamos lanzar algo imperfecto para validar. 🤷♂️
❌ Equipo
Nos elegimos por las razones incorrectas. Primero amistad y segundo la oportunidad de tomar un apoyo económico gubernamental. Pero la realidad es que no funcionamos juntos para lo profesional.
Amistad y trabajo son dos cosas muy diferentes.
Me hubiera gustado tener la capacidad de ver y saber eso antes de comprometernos a esta aventura.
❌ Entidad Legal
Por el apoyo económico mencionado arriba, incorporamos primero una entidad legal, antes de programar la primer línea de código. Gran error, eso nos trajo un compromiso de largo plazo que sin eso posiblemente hubieramos parado antes.
❌ Compromisos con terceros
Sentirte comprometido a cumplir las condiciones de un tercero, en mi caso, el apoyo de gobierno que venía con compromisos me cegó, y no era tanto dinero eran sólo $7k dólares. Que en su momento era mucho para nosotros.
Eso me bloqueo por completo, y me olvidé que el compromiso debía ser conmigo primero.
Hoy miro para atrás y si bien en ese momento las cosas se sentían inciertas y muy mal ejecutadas, debo reconocer que es experiencia invaluable que tenía que vivir.
Aprendí y mucho, es más creo que aprendí mucho más años después cuando tuve la capacidad de compararlo con más aprendizajes que vinieron después.
¿Porque contar esto hoy?
Inspirado en una iniciativa de que comenzó Matías de reunirnos a varios que escribimos aquí en Linkedin, hoy nos juntamos a contar una de nuestras historias de fracaso.
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