1
Products
reviewed
0
Products
in account

Recent reviews by Paul Xavier

Showing 1-1 of 1 entries
59 people found this review helpful
2 people found this review funny
1.3 hrs on record
Hablar de la figura de Savant a muchos les resultará nuevo. Tras este nombre se esconde Aleksander Vinter, un productor noruego de música electronica que sufre del "Síndrome de Savant", el cual se define como un transtorno derivado del autismo que confiere a quienes lo sufren capacidades anormalmente amplias en campos como el arte, el cálculo, la memoria y la capacidad cerebral. Aprovechándose de su transtorno, Aleksander se ha convertido en pocos años en un autor inquietantemente prolífico, de talento desmesurado, y ante todo, extraño; el cual aliado con un tímido pero poderoso D-Pad Studio, nos trae un divertido videojuego con un impresionante apartado artístico y una esencia difícil de encontrar en otros símiles.

La trama en sí, no representa mucha complejidad. Expuesta tan solo mediante una breve cinemática de introducción al comienzo del juego en la cual se deja ver como Savant, convertido en una especie de alter-ego inspirado en los villanos más típicos del mundillo (el cual también "encarna" en sus canciones), se cae de lo más alto de una torre debido a su contacto fallido con una extraña esfera de energía. El concepto de nuestro objetivo, de nuevo se presenta de forma simple: debemos subir de nuevo al piso más alto para controlar esa energía desatada.

La sencillez, en este caso es una virtud clara. Si bien los creadores pudieron haberse extendido más dando explicaciones sobre el lore creado por Savant, o simplemente extender esta rama que nos concierne, ajustaron sus movimientos para crear una historia corta y nada barroca que sin embargo sintetiza en una aventura fresca y eficaz. Es así como, hábilmente, se crea un videojuego equilibrado que nos oferta oleadas de diversión sin exceder demasiado en sus capacidades, dándonos los justo y nada más. Se agradece a la par el nivel de dificultad, ciertamente elevado, el cual nos concede un desafío más duro; además de la forma de solventar la corta amplitud vital del título con diferentes modos de juego y una buena capacidad rejugable.

El apartado jugable también peca de sencillo, pero quizá no congenia tan bien como lo hace la trama. Básicamente, el juego nos sitúa entre dos plataformas estáticas, situadas una a cada lado de la pantalla, siendo nuestro único escenario. Solo podremos movernos entre esas dos, bien rodando, bien saltando, para esquivar a los enemigos y disparar a todo lo que nos parezca amenazador en un ángulo de 360º. Es un hecho, además, la ausencia prácticamente total de lo que tildaríamos de errores o 'bugs', compensando esta simpleza; además de contar con un hábil sistema de poderes desbloqueables bien equilibrado; y con un ritmo frenético y astuto que nos hará ansiar la mayor puntuación posible en cada una de nuestras partidas.

En lo tocante al tema visual, estamos ante uno de los puntos fuertes del producto. Los artistas de D-Pad Studio muestran una habilidad y un talento asombroso a la hora de dibujar, como podemos ver en el prometedor e inacabado proyecto de la misma casa, "Owlboy". Cada apartado, desde el personaje protagonista hasta los enemigos, pasando por unos cuidados efectos visuales, muestran una dedicación a cuerpo y alma desmesurada en calidad de píxeles. Además de estar tan bien concepcionados, el hecho de que se muestren tan sincronizados con el ambiente creado por la soberbia intervención musical y la dinámica del juego, aportan bagaje a lo que no deja de ser un producto extraordinario. Todas esas tonalidades oscuras, la calidad gráfica de los entornos, y lo adecuado de sus efectos, nos hacen una grata aproximación a lo que sería la visión del músico de su propio mundo imaginario y artístico.

Hablando de temas fuertes: la música. Si el juego, basado en la figura de un músico de la figura de Savant pecase de mediocre, no estaría escribiendo este análisis. Es un hecho que el comprador, fan o no del compositor, espera una impecable caricia a sus oídos, cosa que se cumple con creces en este nuestro analizado. Con varias de las canciones del joven introducidas directamente en los escenarios (dándonos la posibilidad incluso de elegir entre ellas) nos deleitaremos en cada disparo con las obras de este genio musical. Si a esto le añadimos un buen puñado de efectos de sonido muy adecuados al estilo de música de Savant y que además acompasan a la perfección con el resto de apartados, tenemos la perfecta combinación. Quizá, es cierto, una opción acertada hubiera sido la de ensanchar la cantidad de canciones dentro del juego, ya que se pueden volver repetitivas para nuestra audición tras varias horas de juego si no somos acérrimos seguidores del autor.

En resumen, estamos ante un producto muy notable, con una gran calidad dentro del apartado audiovisual y una astuta organización jugable que nos hará divertirnos un buen rato machacando botones. Si eres un fan del músico, es claramente un producto que debes comprar; si no, es un buen comienzo para llegar a conocer su vasta obra. Una pena que se disfrute en pocas horas y que la presencia del músico en el desarrollo del juego no se haga tan patente como debiera.
Posted 23 December, 2014. Last edited 23 December, 2014.
Was this review helpful? Yes No Funny Award
Showing 1-1 of 1 entries