10 años después Bungie cierra una de las mejores historias de ciencia ficción con un videojuego que demuestran por qué son tan buenos. Análisis de Destiny 2 La Forma Final

10 años después Bungie cierra una de las mejores historias de ciencia ficción con un videojuego que demuestran por qué son tan buenos. Análisis de Destiny 2 La Forma Final

Un broche de oro, más un futuro garantizado para un juego que está lejos de agotarse

5 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Destiny

Destiny 2: The Final Shape (La Forma Final en español) no solo representa la conclusión de un arco narrativo que lleva toda una década en cocción, sino también de una etapa más profunda y personal. Recuerdo como si fueran ayer aquellos tiempos en los que pocos confiaban en el ambicioso plan del dúo Bungie-Activision, las críticas que se cebaron justificadamente con la historia del juego y los muchos "killers" que tardaron más bien poco en evaporarse.

He llegado a la conclusión de que uno no puede exprimir el ciento por cien de D2 TFS sin entender y apreciar que hubo un tiempo en el que este juego ocupaba un lugar extraño, cuestionable, entre el shooter multijugador anual y el MMO tradicional en el que casi nadie en la industria triple-A desea o encuentra razonable aventurarse. El mérito real de esta expansión no está en ser solo genuinamente recomendable, sino en serlo después de haberse tropezado tantas veces durante el recorrido.

Menciono todo esto antes de emitir un solo juicio de valor porque creo que los padres de Halo han dado al fin el salto cualitativo que necesitaban: con The Final Shape, ya no hablamos de "está mejor encaminado que nunca" o "está bien con sus más y sus menos". Ahora es un juego que nos está dando todo cuanto puede ofrecer su fórmula, y si bien eso no lo exime de errores, puedo afirmar sin miramientos que es una entrega rocosa. Sin medias tintas.

Concluyendo la historia de Destiny

El año pasado, dediqué una voluminosa parte del análisis de la expansión D2 Lightfall a hablar de lo decepcionante que fue su apartado narrativo: por mucha rabia que me diese como fan, lo cierto es que había dejado la historia en un punto extremadamente flojo para cerrar lo que en aquel entonces ya conocíamos como el penúltimo episodio. Parte de ello tuvo que ver con el hecho de que Bungie no daba suficientes explicaciones a la pregunta más importante que se planteaba en la campaña, algo que desanimó a muchos de sus seguidores más acérrimos.

Imagen de la campaña de Destiny 2 The Final Shape

The Final Shape da un giro de 180° a ese problema, respondiendo con fluidez a muchos de los misterios que nos habían planteado a lo largo de todos estos años —¿qué son las estatuas veladas de las pirámides? ¿cómo es el Viajero por dentro?— de manera orgánica, visual, tangible; no necesitas leer ninguna pestaña de texto desbloqueable para imaginar cómo se han desarrollado los eventos más importantes de la trama porque todos ellos se resuelven delante de tus narices. Tanto es así, que a veces me resulta hasta chocante.

Siempre he pensado que Destiny 2 es mejor cuando se reclina cómodamente sobre la infinitud del cosmos. Muchas de sus historias más poderosas son también las más escondidas, aquellas que hablan sobre civilizaciones que jamás se han representado in-game o que solo se pueden explicar con una palabrería científica que escapa por mucho al jugador promedio. Personajes que cambian para siempre dentro de paradojas espacio-temporales, relatos sobre los orígenes de dioses paracausales o la conquista de mundos. Es un tipo de historia inspiradora, estimulante; pero por su propia naturaleza, también elusiva.

Y ahora que Bungie ha aprovechado la ocasión de materializar todo eso con modelados 3D, secuencias de vídeo con CGI, líneas de diálogo dobladas a múltiples lenguas más otros tantos canales; lo único que me incomoda es la sensación de que todos esos misterios cósmicos eran más grandilocuentes cuando costaba abarcarlos. ¿Eso es malo? No: es una cuestión de expectativas de alguien que tiene un interés superlativo por este universo de ciencia ficción. La realidad es que, para prácticamente cualquiera de nosotros, el "nuevo" Destiny 2 es una victoria incuestionable en todos los sentidos.

Imagen de la campaña de Destiny 2 The Final Shape ¿Qué son las estatuas veladas? No lo busques en internet: te lo cuentan en la campaña.

Habiendo resuelto cuestiones y tareas pendientes al estilo de aclararle al jugador qué está pasando exactamente durante la trama, respondido numerosas preguntas clave e incluso recuperado muchas de las ideas que Joe Staten había escrito en el guion original de 2013 (antes de aquel infame supercut) lo que queda es una generosa colección de momentos emotivos, resolutivos y escritos con gusto. La subtrama de reunir a la Vanguardia es un buen ejemplo, en mi opinión: Cayde-6 no vuelve como un alivio cómico, sino como un agente crucial para el desarrollo de la historia, útil para el jugador, carismático y único.

Zavala, por otro lado, sufre una crisis que se había vuelto inevitable a estas alturas; pero en lugar de convertir eso en un motor de frustración como ocurrió el año pasado con Osiris y su recalcitrante interés por seguir hacia adelante, más bien el titán azul canaliza ese arco propio en la cruzada contra el Testigo dibujando un panorama mucho más rico e interesante. Tal vez siete misiones de la campaña (ocho, si contamos Excisión) se queden hasta cortos para el ritmo tan sano que está teniendo Bungie y lo que podría haber hecho con Caiatl, Mithrax o Savathûn de haber tenido una ambición radicalmente superior para sus DLC.

La idea que deseo transmitirte es que la campaña de The Final Shape es sólida ante todo. Esta vez, no se te puede escapar ningún misterio clave; las secuencias cinemáticas están cargadas de acción y los temas más personales están resueltos con mucho acierto. Insisto en que ciertas cosas han terminado pariendo momentos a lo Marvel's Avengers que están bien sobre la pantalla, pero que tal vez no hacen justicia al mythos de Destiny 2. Es lo que tiene querer resolver las cosas en el recorrido principal de un juego de acción con más bien pocas interrupciones en lugar de hacerlo mediante novelas, como ocurrió años atrás con el Jefe Maestro y compañía. Y dentro de esas limitaciones, está genial.

Imagen de Destiny 2 The Final Shape

Algo ha cambiado en la acción de Bungie

Hace unas semanas, escribí en 3DJuegos PC un artículo hablando acerca de cómo Destiny 2 lleva un tiempo estancado en lo que respecta al combate: The Witch Queen (2022), por ejemplo, es una de las mejores expansiones hasta la fecha; pero prácticamente todos los jefes de su campaña son lo mismo. Fase de daño, rompes la inmunidad y vuelta a empezar. Ojo, también vas a encontrar de eso en The Final Shape; pero me alegra mucho ver que, sobre todo en la primera mitad del recorrido, Bungie se ha atrevido a cambiar un poquito las cosas.

Ahora, en lugar de "combates con rompecabezas" tenemos muchos "rompecabezas con combates" por así decirlo. Eso es importante porque en el pasado, el creciente catálogo de habilidades y efectos a disposición de nuestros personajes terminó trivializando innumerables encuentros; pero ninguno de esos poderes es capaz de resolverte la tarea de memorizar el símbolo que suelta tal o cual enemigo al morir, por ejemplo. Incluso la llegada de las subclases Prismáticas, de las que hablaremos en breve, integran cierto componente estratégico a las contiendas porque te obliga a gestionar su recarga.

Con esto último, Destiny 2 ha hecho varias cosas bien. Por ejemplo, ha tomado buena nota de lo molesto que fue desbloquear las subclases de Estasis y Atadura en las últimas expansiones, así que en esta ocasión el juego te da acceso a este nuevo juguete desde prácticamente el principio de la aventura. Los aspectos y fragmentos asociados, eso sí, están escondidos y el proceso de obtenerlos puede volverse algo tedioso. Pero una vez obtienes todos, se te abre un mundo de posibilidades. Admito que la idea de adquirir un potenciador de arco usando una melé solar (por decir) se me hizo liosa, pero valió la pena.

Imagen de Destiny 2 The Final Shape No te quedes solo con la historia. El contenido que viene después es genial y muy imaginativo.

Naturalmente, el equipamiento es el que termina cosiendo unas habilidades con otras, y en este sentido también creo que The Final Shape ha cumplido con creces. En lugar de soltarnos nuevos arquetipos de arma (p. ej. espadas o subfusiles) en esta ocasión Bungie se conforma con darnos armazones nuevos y transformativos para armas existentes. Por ejemplo, el rifle automático del Débil Corazón dispara usando el registro de proyectiles en lugar de hitscan, algo que no veíamos desde Cerberus+1; y tiene una dinámica única para curar a los aliados. Cosas que en cualquier otra situación solo veríamos en la rareza excepcional.

Todas las piezas excepcionales debutantes son de buen recibo, sin quedarse en simples gimmicks con pocas aplicaciones reales; y en cuestión de pocos días se han acomodado en el metajuego sin ninguna clase de problema. Sí te diré que los distintivos de clase excepcionales, que regresan desde la era de TTK (2015), han tenido un recibimiento algo polémico porque solo aparecen después de completar una misión excepcional llamada Dual Destiny que tiene la particularidad de que solo se puede jugar en una escuadra de dos personas con canales de comunicación activados: necesitas hablar con tu compañero.

De algún modo, esta idea ha desencadenado un estallido de ira colectiva que ha estropeado un poco lo que a todas luces era un estreno de sobresaliente. Piensa lo que quieras al respecto, pero si me preguntas a mí, te diré que la misión tiene un diseño brillante y es el fruto de una Bungie desatada que viene a desafiarse a sí misma con nuevas ideas. Lo mismo ocurre con Excisión, de la que hablaba más arriba: es la primera actividad para doce jugadores soportada de manera oficial, y también puro espectáculo. Un momento de clímax, un festival de súpers y reliquias seguido de uno de los momentos más emotivos del juego.

Imagen de Destiny 2 The Final Shape

En lo que respecta estrictamente a servicio, que al final del día es de lo que va esto, los americanos han dado en el clavo acelerando todo su plan de despliegue: aquí tienes la expansión, a los tres días llega la raid, inmediatamente después tienes un epílogo y al completar este llega el tráiler de todo lo que va a llegar este año... más una pista de lo que vendrá después. Y eso sin contar con esa misión escondida para dos personas de la que hablábamos. Ha sido un no parar, un festín. Incluso en el momento de escribir estas líneas, semanas tras el lanzamiento, aún se están desbloqueando novedades como la dificultad Grandmaster para Excisión.

¿Qué pasará a continuación? Bueno, el primer vistazo al "nuevo" modelo episódico de Destiny 2 —con una mejor cadencia que las temporadas anteriores— nos ha dejado con unas cuantas ideas prometedoras para el resto del 2024: historias vinculadas al final de la campaña principal que habrá que valorar de manera individual a su debido tiempo. Un misterioso proyecto llamado Codename Frontiers que tal vez describa el futuro del juego a falta de noticias sobre una secuela completa. Lo veremos el año que viene. Pero por ahora, lo que tenemos es un juego que está dando lo mejor de sí en todos los sentidos.

El mejor Destiny

Recomendado
Destiny 2: La Forma Final análisis

Destiny 2: La Forma Final

Por: Mario Gómez
Recomendado

The Final Shape es la mejor iteración de Destiny hasta la fecha. Bungie cierra los diez años que ha tardado en concluir su primer arco principal con una historia emotiva y sorprendentemente bien narrada, así como unas ganas locas de desafiarse a sí mismo a la hora de diseñar encuentros y actividades. Sus combates no podrían estar mejor y el volumen de sorpresas que ha dado, desde la raid de cinco encuentros hasta las misiones de 2 y de 12 jugadores, están genial. Con eso y un soporte intachable, el futuro del juego es brillante.

5 cosas a tener en cuenta
  • Los primeros días de TFS han llegado con unos cuantos bugs
  • Es el final de la historia, pero no de Destiny 2 ni de la saga
  • No tendrá cuatro temporadas, sino tres episodios mayores
  • Introduce nuevos armazones de arma y subclase Prismática
  • La incursión más difícil de la saga hasta la fecha
Jugadores: 1-12
Idioma: Textos y voces en español
Duración: Incalculable
VÍDEO ESPECIAL

3.394 visualizaciones

20 JEFES CONTRA LOS QUE ES IMPOSIBLE PERDER

Los jefes de cualquier videojuego suelen suponer uno de los grandes retos para superarlos. Sin embargo, hay videojuegos donde nos encontramos con jefes que no suponen absolutamente ningún desafío. Os presentamos a varios.

  翻译: