La Realidad Virtual es un mundo fascinante que todavía tiene que abrir más hueco del que tiene. Sin embargo, cada vez son más los que se animan a probar esta tecnología, pero hay que tener en cuenta una serie de cosas. Por ello, en la siguiente guía, os dejo 5 consejos que me hubiera gustado recibir por parte de alguien que ya tenía más experiencia. ¡Espero que os sirvan!
5 consejos para iniciarse en la VR
A continuación, os dejo 5 consejos que me hubiera gustado saber antes de embarcarme en el amplio mundo de la Realidad Virtual.
1.Date tiempo
Algunas personas experimentan mareos las primeras veces que se juega. A mí por ejemplo me pasó con Skyrim. Los mareos también depende del aparato que se esté usando, pero también pueden ocurrir si nos metemos sin acostumbrar al cuerpo en experiencias muy cañeras. Por ello, es recomendable empezar por algunas experiencias visuales o juegos sencillos. Es solo cuestión de tiempo.
2.No te quedes solo en los juegos
La VR ofrece mucho más que videojuegos como por ejemplo zonas de reunión, actividades o experiencias cinemáticas. Es importante entender que no es una experiencia solamente para jugar, encontrando que distintos tipos de públicos pueden obtener beneficios de ella.
3.Busca accesorios para mejorar la experiencia
Hay accesorios como sujeciones o guantes que hacen la experiencia más cómoda. Pensad que llevamos un casco puesto en nuestra cabeza o mandos en las manos. Por ello, es importante que sean lo más cómodos posibles y, a veces, merece la pena invertir muy poco para conseguir mucho.
4.Ten el espacio adecuado
Es verdad que necesitamos espacio libre para según que actividades, pero con muchas otras no es necesario tanto. Sin embargo, tenemos que asegurarnos de que contamos con el adecuado. Sobre todo al comienzo, es fácil perder la orientación y acabar cerca de un mueble o de la tele, aunque las propias gafas te delimiten el lugar de acción.
5.Mantén el equipo limpio
Esto es muy importante y al igual que las consolas requieren unos cuidados, las gafas de VR también. Si no lo hacemos, los restos de sudor quedan arraigados generando malos olores o desgaste del material. Hay que tener en cuenta que vamos a sudar mucho, sobre todo si usamos juegos muy activos. La limpieza y el buen mantenimiento es súper necesario.