De Barcelona a Tokio: la ruta de los miles de iPhone robados cada año en la capital catalana

Que nos roben el iPhone es una de las peores experiencias que nos puede pasar cuando estamos de viaje. Barcelona es una de las grandes capitales mundiales del turismo, y es que cada año la visitan siete millones de personas a los cuales hay que sumar los más de millón y medio de habitantes. Con tal cantidad de personas, los ladrones aprovechan para hacerse con uno de los robos más fáciles: el de los smartphones.

A dónde van los más de 30.000 smartphones robados al año en Barcelona

El año 2023 los Mossos d’Esquadra registraron 31.007 denuncias por sustracción de teléfonos móviles en Barcelona. Dentro de estos robos hay iPhones y smartphones de otras marcas. Cualquier modelo es bueno para sacarles más adelante dinero en el mercado negro. Y es que el iPhone dispone de técnicas antirrobo avanzadas que los hacen inutilizables una vez se han bloqueado. ¿Qué hacen con ellos y a dónde van?

El objetivo principal de los ladrones es sacarlos fuera de la Unión Europea para así esquivar el bloqueo IMEI que pueden realizar las operadoras móviles a nivel estatal y europeo. La gran mayoría de iPhones robados van al norte de África, pero se han encontrado hasta en Tokio, a más de 10.000 kilómetros de distancia desde Barcelona.

Los roban y envuelven en papel de aluminio "como si fuese un bocadillo"

Los Mossos d’Esquadra alertan que la zona donde más robos de iPhone se producen es en el Eixample. Una zona céntrica, con alta densidad turística, comercial y gastronómica. Hay una media de 85 denuncias al día por robo de teléfonos móviles.

El método de los ladrones es simple, aprovechan momentos de despiste (sobre todo de los turistas) para coger el iPhone de una mesa, bolso, tirón de las manos... Tras hacerse con él, envuelven el smartphone en papel de aluminio para aislarlo del posicionamiento GPS. Después, ya en un piso, empieza su preparación para el viaje al extranjero.

Ya en el norte de África, como destino principal, se les cambian piezas como pantallas y baterías para venderlos de segunda mano. Esto sucede sobre todo en smartphones Android al ser más sencillo saltarse los bloqueos. Si hablamos de iPhone, lo que se suele hacer es quitar todas las piezas para venderlas de manera independiente para reparaciones no oficiales. Es decir, roban los iPhones para luego vender las pantallas y baterías por separado en el mercado negro.

Las cifras de robos bajan, aunque piden endurecer las penas

Pese a la impresión de que cada vez se producen más robos, las cifras dejan algo de esperanza. En 2023 se robaron 31.000 móviles en Barcelona, y si lo comparamos con 2019, la cifra era de 39.000. Una cantidad que se ha reducido por la presión policial. Sin embargo, muchos de los ladrones son reincidentes y no llegan a entrar en prisión.

Desde los Mossos d’Esquadra piden penas más duras y juicios más rápidos. También aprovechan para recordarnos que siempre hay que poner una denuncia aunque no tengamos esperanzas en recuperar el iPhone. Es importante aportar el número IMEI para que se pueda localizar e identificar el smartphone en el caso que se encuentre.

Para protegerte frente a un robo te recomendamos familiarizarte con la aplicación Buscar y activar el modo antirrobo avanzado del iPhone. Por supuesto, ser consciente de tu alrededor es clave para evitar que suceda. Tenlo siempre en el bolsillo delantero y nunca en el trasero o bolsos. Y evita sostenerlo en las manos en lugares de fácil huida como terrazas de cafeterías o junto a las puertas del metro.

Fuente | El Español

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