Mataró recupera las campanas de Santa Maria, una vez restauradas: "El tañido será diferente, pero igual de alegre"

La ciudad de Mataró ha recuperado este martes las cinco campanas de la basílica de Santa Maria, después de cuatro meses de trabajos de rehabilitación. Los bronces se descolgaron el mes de marzo por primera vez desde la Guerra Civil, con el objetivo de hacer una restauración integral que garantizara su conservación y, además, permitiera recuperar para la ciudad el repique tradicional de 1927. La intervención de limpieza y la sustitución de los contrapesos de hierro por unos de madera lo hará posible: "El toque será diferente, pero igual de alegre", advierte una de las campaneras de Santa Maria, Fátima Soler.

La "prueba de fuego" para las campanas será la fiesta mayor de Les Santes de finales de julio. Antes, los campaneros harán un "curso acelerado" para aprender los nuevos toques. Hasta ahora, tocaban las campanas haciéndolas girar con la mano, mientras que el toque tradicional que se hará a partir de ahora es con cuerdas y la campana no gira sobre su propio eje, sino que bascula de un lado al otro. Solo esta diferencia variará la sonoridad de los bronces.

Mataró pedirá que su Semana Santa sea catalogada como de interés turístico en Catalunya

También condicionará el repique el material de los nuevos contrapesos, que ya no son de hierro, sino de madera. "Las vibraciones que retransmite la madera son diferentes", explica Fàtima Soler. La campanera dice que el sonido será más "limpio" porque se han pulido las campanas.

Ahora, comenta Soler, las posibilidades de repique se amplían, puesto que el control con cuerdas permite "toques más variados y más perfeccionados". Los primeros tañidos se podrían escuchar el sábado 13 de julio, durante la formación que harán los campaneros, y el estreno será a partir del día 19, como preludio de Les Santes.

La puesta de largo será durante la fiesta mayor y uno de los actos más esperados por los campaneros y la ciudadanía será la 'Barram', del mediodía del 26 de julio, que reúne a decenas de personas en la plaza de Santa Maria para escuchar el repique ininterrumpido de las campanas durante media hora.

Después de la fiesta mayor, las campanas seguirán sonando como hasta ahora, cada sábado al mediodía. El histórico grupo de campaneros las seguirá tocando manualmente y se prevé que a partir del otoño se hagan nuevas formaciones del 'nuevo' toque tradicional en las que pueda participar toda la ciudadanía, para que más personas se puedan incorporar como campaneros.

En este sentido, Soler destaca que durante el proceso de recuperación de las campanas ha habido muchas personas que han manifestado su "aprecio" por los bronces de Santa Maria: "Nos ha sorprendido mucho la expectativa. Ha sido todo muy intenso".

Una historia que se remonta a la Guerra Civil

Con el estallido de la Guerra Civil, las campanas de Santa Maria de Mataró se fundieron para hacer armamento y el campanario no se recuperó completamente hasta 1954, con las mismas campanas que hay actualmente.

Desde principios de los años 80, el grupo de campaneros ha mantenido en la ciudad los toques manuales, de manera ininterrumpida. Esto fue así con el conjunto de las cinco campanas litúrgicas hasta el año 2017, cuando se detectó una grieta en la campana 'Carme', que aquel mismo año dejó de sonar.

Durante los últimos siete años se han tocado las otras, mientras se analizaba el estado de conservación del conjunto. Finalmente, se ha optado para hacer una rehabilitación integral del resto para evitar el deterioro y la campana 'Carme' se ha vuelto a fundir y se ha hecho de cero porque era irreparable.