El Slayer regresó con energías redobladas: DOOM Eternal no solo es la entrega más potente de la saga, sino que también se trata de uno de los mejores juegos de 2020. Palabras mayores en ambos casos. Una verdadera espiral de destrucción colmada de demonios y violencia. Ahora bien, en esta ocasión, llevar una gloriosa BFG no nos garantizará salir de una pieza de su explosiva campaña y su todavía más salvaje multijugador.
DOOM Eternal es un carrusel de emociones. Un juego que no solo te invita a disparar primero y apuntar cuando sea posible, sino que directamente te exige que seas agresivo incluso en las circunstancias más complicadas. Porque en la apoteósica llegada del infierno a la Tierra la moneda de cambio es la ultraviolencia, y lo cierto es que el Slayer lleva bastante calderilla en el bolsillo de su traje.
La muy celebrada llegada de DOOM Eternal al Game Pass de Microsoft es todo un hito dentro del cada vez más potente servicio de Microsoft, y también una ventana para descubrir esta joya imprescindible. Precisamente por ello, en VidaExtra hemos preparado una selección de consejos y trucos que te ayudarán a exprimir más y mejor uno de los mejores juegos de la actual Bethesda. Posiblemente, alguno de ellos te ahorre más de un disgusto.
A continuación los 17 mejores consejos y trucos esenciales para DOOM Eternal con los que desatar el infierno en la Tierra y saciar tu apetito por la destrucción.
Lo básico: esto es DOOM y si dejas de moverte como un poseso estás muerto
Como ocurría con DOOM (2016), Bethesda ha diseñado DOOM Eternal para conservar la esencia de los clásicos de iD Software. Y eso se traduce en que si en mitad de una batalla te detienes un instante serás arrollado por oleadas de demonios infernales.
DOOM Eternal no es Call of Duty o Sniper Elite: una vez los enemigos sean conscientes de tu existencia irán a por ti como bestias. De hecho, olvídate de continuar avanzando en la campaña hasta que no hayas eliminado hasta el último de ellos. Eso sí, ten presente que el Slayer no está precisamente indefenso: además de su arsenal, su creatividad a la hora de hacer remates es brutal.
Aprovecha al máximo el diseño de niveles y las habilidades del Slayer, ya que son realmente generosas: esquiva, saca partido del doble salto, pasa todo el tiempo que puedas en el aire, usa las barras para impulsarte y los potenciadores para desplazarte más rápido. Jamás te quedes quieto mientras haya un enemigo vivo y no dejes de disparar en el proceso.
Estudia el mapa a conciencia, incluso cuando sepas a dónde tienes que ir
Los niveles de DOOM Eternal están colmados de secretos y todos merecen la pena. Algunos de ellos son coleccionables, lo cual incluye figuritas de acción, música o desafíos extra. Otros te permitirán mejorar tu capacidad de destrucción e incluso hacerte con la gloriosa Desmakyr.
Una vez hayas barrido una zona de enemigos, vete al menú de mapa y no dejes de pasear hasta que veas que todas las zonas del suelo estén de color verde, completamente cubiertas y con todos los iconos a la vista. Llegado determinado momento incluso encontrarás Puestos de Automapa en los que, además, se marcarán con interrogación los objetos de valor que haya.
Por otro lado, si no tienes claro qué hacer a continuación en el modo Campaña, basta con pulsar la cruceta hacia abajo y se marcará en tu pantalla la dirección del siguiente tramo al que dirigirte.
Si te ves superado, baja la dificultad
Los niveles de mayor dificultad en DOOM Eternal son un desafío sensacional, pero hay tramos concretos que pueden llegar a ser realmente frustrantes. La buena noticia es que ajustarla es sencillísimo y lo puedes hacer sobre la marcha, sin tener que iniciar una partida nueva.
Simplemente pausa el juego, vete a ajustes y desde la pestaña de 'Partida' verás que el primer parámetro es la dificultad. En cualquier momento podrás alternar los niveles de dificultad de la campaña salvo en la dificultad Ultrapesadilla y en el modo Vidas Extra.
Como nota adicional, DOOM Eternal no penaliza de ninguna forma por subir o bajar la dificultad, aunque -lógicamente- habrá recompensas para los más atrevidos acordes a su destreza.
Da igual lo feos que sean tus enemigos: son piñatas repletas de munición
En DOOM Eternal rara vez te quedarás sin munición. Entre otras cosas porque al destruir a tus enemigos de maneras gloriosas estos se desplomarán dejando regado el suelo de vísceras, sangre, escudos y balas.
En caso de verte muy apurado de escudos o munición, tienes dos alternativas efectivas para convertir tus enemigos en valiosos recursos.
- Las ejecuciones, o Glory Kills, se realizan pulsando el stick derecho o el botón correspondiente en el teclado cuando un demonio próximo está tambaleante. Las ejecuciones siempre dan objetos de salud, y mientras menos salud tengamos más saldrá de nuestros enemigos.
- La Motosierra es la manera más eficaz de convertir a cualquier enemigo menor en un montón de munición y salud. No obstante, para usarla necesitaremos combustible y solo podremos llevar tres cargas cada vez, así que deberemos usarla con relativa moderación.
Como comentamos, ser creativos a la hora de pulverizar a los demonios está muy bien recompensado en DOOM Eternal.
Sobre los desafíos de misión
Si bien podremos disfrutar del caos y de la destrucción a nuestro ritmo, hay un aspecto de DOOM Eternal que merece la pena abordar: los desafíos de misión que encontrarás en la pestaña de Desafíos en el expendiente.
Lo interesante de éstos es que por cada desafíos de misión que logremos obtendremos un punto de Traje de Pretor, lo cual es tremendamente conveniente. Además, si completamos los tres desafíos ganaremos una batería Centinela para la Fortaleza del Destino.
Las baterías Centinela son un incentivo muy potente, ya que con ellas podremos obtener recompensas como acceso a nuevas secciones de la propia Fortaleza del Destino, con lo que nos conviene resolver todos los desafíos desde los primeros compases del juego.
En qué nivel consigo cada arma del Slayer
Hay una sección de la Fortaleza del destino dedicada a los coleccionables que vamos encontrando a lo largo de la campaña, Y ninguno de ellos es tan interesante como las armas del Slayer.
Como en otras entregas de DOOM, las armas serán una manera de enfrentarnos a la creciente dificultad del propio juego, con lo que mientras más avanzamos más poder destructivo tendremos a lo largo de los 13 niveles de DOOM Eternal.
Encontrarlas es sencillo, algunas las obtenemos a lo largo de la trama y otras están bastante a la vista. Por nuestra parte, te indicamos a continuación en qué momento de la campaña podrás estrenar juguetito nuevo.
- Escopeta de combate: la tienes desde el comienzo
- Cañón pesado: en el nivel 1: Infierno en la Tierra
- Lanzagranadas: en el nivel 1: Infierno en la Tierra
- Motosierra: en el nivel 1: Infierno en la Tierra
- Escupellamas: en la Fortaleza del destino tras superar Infierno en la Tierra
- Fusil de plasma: en el nivel 2: Exultia
- Bomba de hielo: en la Fortaleza del destino tras superar Exultia
- Lanzacohetes: en el nivel 3: Base de Sectarios
- Super escopeta: en el nivel 3: Base de Sectarios
- Balista: en la Fortaleza del destino
- Ametralladora Gatling: en el nivel 5: Supernido Sangriento
- BFG-9000: en el nivel 7: Núcleo de Marte
- Crisol: en el nivel 9: Taras Nabad
- La Desmaykr: Completa los seis portales de Slayer del juego
Además de los anteriores, en Exultia (el nivel 2) aprenderemos el Puñetazo sangriento, un golpe demoledor con el que podremos pulverizar a varios enemigos que se recarga a base de hacer ejecuciones. Si bien no cuenta como un arma, bien ejecutado es terriblemente efectivo.
¿Cómo obtener la Desmakyr?
La Desmakyr es el arma definitiva de DOOM Eternal, se encuentra en la Fortaleza del Destino (nuestro hub del juego) y lograrla es parte de la experiencia.
Para obtenerla deberemos reunir las seis llaves del Empíreo. Cada llave se obtiene como recompensa al superar el reto de los portales de Slayer repartidos por los distintos tramos de la campaña de DOOM Eternal.
De hecho, no bastará con encontrar los seis portales Slayer: oculto en las proximidades de éste se encuentra la llave para abrirlo. Eso sí, superar la oleada de enemigos de cada portal Slayer supone un verdadero desafío, a lo que hay que sumar que no recuperaremos la munición y las vidas que gastemos en ellos.
A continuación, la localización de todas las llaves de portal y los portales de Slayer de DOOM Eternal
¿Qué son los niveles maestros?
Si bien en DOOM II, los niveles maestros son una serie de nuevos escenarios de mayor dificultad, en DOOM Eternal se apuesta por ofrecer versiones alternativas y mucho más desafiantes de varios niveles ya existentes.
No todos los niveles del juego cuentan con su propio nivel maestro, pero la experiencia en ellos es bastante más intensa, ya que veremos demonios más pesados y oleadas de enemigos mucho más poderosas y violentas, además de otros cambios creados para la ocasión.
¿Qué son los Encuentros Secretos?
A lo largo de los niveles nos encontraremos con una serie de portales rojizos ocultos llamados Encuentros secretos. En esencia, se trata de combates muy intensos y completamente opcionales que, en caso de aceptar el desafío, deben ser resueltos antes de que el temporizador llegue a cero.
La recompensa, en caso de superarlo, es nada menos que uno de los 10 Puntos de Arma de cada nivel, los cuales se emplean para mejorar las modificaciones de nuestras armas desde el menú del 'Arsenal' del Slayer. Dicho de otro modo, si queremos obtener todas las mejoras de las armas, deberemos superar todos los encuentros secretos.
Conviene tener en cuenta que, al igual que los portales del Slayer, la munición y los recursos que empleemos en los Encuentros Secretos no los recuperaremos una vez que el cronómetro llegue a cero. Sin embargo, en este caso podremos volver a intentarlo sin tener que reiniciar la partida con solo tocar el portal rojizo.
Entrena en la Fortaleza del Destino
Cuando hayamos obtenido las suficientes baterías Centinelas podremos acceder a la zona inferior de la Fortaleza del Destino, donde se encuentra la Prisión Demoníaca, la cual sirve a modo de entrenamiento para el Slayer.
Uno de los aspectos más interesantes de la Prisión Demoníaca es que en ella es posible practicar el combate contra demonios sin morir, la munición que usemos en ella será completamente repuesta y no consumiremos Vidas Extra. Dicho de otro modo, podremos practicar sin límite alguno.
Además, conforme avancemos en la campaña y vayamos descubriendo nuevos demonios iremos desbloqueando más encuentros. Siendo, en todo caso, una herramienta estupenda para probar nuestro arsenal, mejorar nuestra movilidad, detectar las debilidades de los demonios y, ¿por qué no? generar el caos y la destrucción sin motivo alguno.
No te olvides de los Hitos, los Triunfos y los Eventos
Más allá de los coleccionables, hay una barbaridad de desbloqueables en DOOM Eternal. Algunos de ellos, incluyendo los trajes del Slayer, se obtienen a base de gastar baterías Centinelas en la Fortaleza del Destino. Sin embargo, también es posible estrenar elementos cosméticos a base de jugar.
A través de los Hitos, una especie de logros dentro del juego, podremos obtener toda clase de emblemas, logos y aspectos al jugar en la Campaña, el Battlemode o alcanzar objetivos u marcas concretas.
Los Triunfos se obtienen a base de jugar a Battlemode, el multijugador competitivo. Es una manera de reconocer nuestros progresos con los diferentes seleccionables del juego.
Además, en DOOM Eternal se celebran periódicamente Eventos temáticos con los que estrenar nuevos contenidos a base de jugar. Es lo más parecido a una justificación por destruir de manera innecesaria que verás en el juego, no dejes pasar la oportunidad.
Todos los demonios tienen, cómo mínimo, un punto débil
Sin excepción: todos y cada uno de los demonios tienen un punto debil en DOOM Eternal. Puedes consultarlos en el Códice una vez los hayas destruido, así como en las pantallas de carga del juego.
Con todo, te damos algunos consejos sobre enemigos muy concretos, por si te cuesta derribar alguno en concreto.
- Aracnotrón: Tu primera prioridad es destruir la torreta del arma. A partir de ahí su amenaza quedará reducida a la mitad.
- Caballero del infierno y el Caballero del Terror : Usa la ametralladora Gatling contra el Caballero del infierno para mermar sus defensas.
- Cacodemonio y Elemental del dolor: Hazle tragar una bomba adhesiva o una granada de fragmentación y observa como revienta. Usa la balista contra el elemental del dolor para que reciba daño adicional.
- Cadáver: Usa el Fusil de Plasma contra el cadáver para reventar su escudo y generar una explosión.
- CiberMancubus y Mancubus: Si quieres que el CiberMancubus pierda su blindaje, dale un puñetazo sangriento: es súper efectivo. Después, concéntrate en destruir los cañones de los brazos del CiberMancubus y el Mancubus. si le haces una ejecución en el pecho se creará una explosión que afectará a los demonios cercanos.
- Pinky: podrás fulminarlo con un puñetazo sangriento bien ejecutado. Evita que te arrolle saltando por encima y ten en cuenta que los disparos por la espalda le hacen mucho más daño.
- Revenant: es muy vulnerable cuando está en el aire. Tu prioridad debe ser destruir sus dos lanzadores del hombro. A partir de ahí, será mucho más sencillo reducirlo.
- Cazador Infernal: su punto débil es su deslizador, de modo que si lo derribas perderá casi toda su movilidad. En caso de que levante sus escudos, anúlalos con tu fusil de plasma.
- Tirano: Es terriblemente lento a la hora de girar, así que aprovéchate de ello. Además, podrás esquivar su onda buscadora corriendo o con un doble salto en el momento justo.
Códigos de Truco
A lo largo de los 13 niveles de DOOM Eternal hay repartidos varios disquetes, y son mucho más que el enésimo homenaje a la década de los 90: cada uno ellos desbloquea un truco que podremos activar a modo de modificador especial desde el menú de Selección de misión.
Dicho de otro modo, podremos repetir las misiones que ya hayamos superado con nuevas condiciones, como ser invencibles, tener todas las runas o contar con munición infinita. Es más podremos activar todos los Trucos que queramos a la vez e incluso se guardan los progresos que hagamos.
Lógicamente, usar los Trucos tiene un contra: si entramos en un nivel con algún modificador activado desaparecerán las llaves de los portales Slayer, con lo que no podremos acceder a estos, hacernos con la llave del Empíreo y desbloquear la Desmakyr. lo cual no quita que sea una opción soberbia para hacernos con el resto de desbloqueables sin despeinarnos.
A continuación, la localización de todos los disquetes con códigos de truco.
Cómo jugar a DOOM y DOOM II en DOOM Eternal
DOOM Eternal tiene muchísimos paralelismos con DOOM y DOOM II, y no es casualidad. De hecho, más allá de lo argumental, es posible jugar a los clásico de iD Software en la más reciente entrega sin coste adicional.
El proceso para lograrlo es encontrar los 13 disquetes con Trucos dispersos por el juego (los cuales hemos detallado justo arriba) más el 14 y último Truco, el cual se obtiene mejorando todas las habilidades del Slayer.
Una vez obtenidos los 14 Trucos, bastará con ir a la Fortaleza del Destino, ir al viejo PC que hay en la sala en la que el Slayer guarda todos los coleccionables. A partir de ese punto veremos cómo se ha desbloqueado una copia completa de DOOM en el PC del Slayer. Pero ahí no acaba la cosa.
Si en la segunda ranura de juego escribimos el código FLYNNTAGGART, además habremos desbloqueado DOOM II. El último paso es tan sencillo como suena.
Consejos Multijugador
Cerramos nuestra selección de trucos y consejos para DOOM Eternal con su alternativa multijugador online: el Battlemode. Una opción de combate asimétrico en la que el Slayer se enfrenta a dos demonios elegidos por otros dos jugadores en partidas rápidas y privadas.
Por si eso fuera poco, el modo Battlemode se juega a tres rondas, de modo que para hacer más interesante podremos añadir una mejora para la siguiente partida al final de ronda.
El primer consejo aquí es que si es nuestra primera partida juguemos como el Slayer: si los demonios controlados por los jugadores actúan usando las mismas mecánicas de otros shooters o las de DOOM Eternal sin tener en cuenta la estrategia del compañero, ambos acabarán siendo presa fácil.
Sin embargo, si los dos jugadores que juegan como los demonios se complementan bien, el Slayer estará sometido a su movilidad y poco a poco acabará desgastando su salud hasta perder la partida.
Si juegas como el Slayer
Lo primero que tienes que tener en cuenta es que, cómo mínimo, deberías haber llegado a la mitad de la campaña de DOOM Eternal. No solo por el hecho de que te habrás familiarizado con la movilidad del Slayer, sino porque podrás sacar todo el provecho de cada una de sus armas.
Por otro lado, tu primera prioridad es evitar que los demonios se pongan de acuerdo. Intenta derribar primero al que consideres que te resulta más fácil aniquilar según tu propia experiencia y sírvete de sus invocaciones para recargar salud y munición de manera constante.
Como en la campaña, si eres el Slayer no dejes de moverte en ningún momento. Intenta mantenerse en posiciones elevadas si hay muchos enemigos para evitar ser rodeado y con los pies en tierra si hay pocos pero muy poderosos para no acabar a merced de misiles teledirigidos en mitad de un salto.
Si ves que tienes problemas con un demonio o no dominas del todo la movilidad, pasa todo el tiempo que puedas en la Prisión Demoníaca de la Fortaleza del destino. Allí podrás entrenar y dominar el arte de la destrucción del Slayer.
Si juegas como los demonios
Lo básico y esencial es pasar por los tutoriales: cada demonio tiene su propio estilo de movilidad, ataques, ventajas y debilidades. Y salvo el Acechador, ninguno se parece realmente al Slayer. Antes de jugar tu primera partida deberás entender cuál es su rol en la partida.
No dejes de invocar bajo ninguna circunstancia:
- Si al Slayer le queda poca salud crea enemigos poderosos, ya que con los que son carne de cañón podrá reponer munición y vida.
- Si tiene mucha salud, crea esbirros de bajo nivel para generar desgaste y limitar su movilidad mientras esperas una situación ventajosa.
Como comentamos antes, la clave de la victoria de los demonios es que ambos estén compenetrados, de modo que si los dos crean el mismo tipo de invocaciones constantemente o se obstaculizan, el Slayer se hará más fuerte y acabará tomando la iniciativa.
Por último, en caso de que nuestro compañero demonio caiga y al Slayer le quede mucha salud, deberemos plantearnos una retirada estratégica hasta que regrese nuestro aliado. Si es posible, escondernos y continuar realizando invocaciones que tengan al enemigo constantemente entretenido hasta que el combate vuelva a ser de dos demonios contra un Slayer.
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