En 2015, Bill Gates protagonizó una de las charlas TED más vistas durante las últimas semanas y la sexta que más visualizaciones acumula en su canal de YouTube. ¿Razón? El fundador de Microsoft aprovechó que en 2015 el impacto de la crisis del ébola aún estaba de actualidad para advertir de que el mundo no estaba preparado para una pandemia.
Para Gates la epidemia del ébola en África era un ejemplo muy significativo que ilustraba lo complicado que resulta movilizar los recursos humanos y materiales necesarios para contener el contagio de una enfermedad infecciosa. A su juicio, durante las últimas décadas se había invertido mucho dinero en armas nucleares y muy poco en sistemas capaces de detener una epidemia como a la que ahora nos enfrentamos.
Por aquel entonces, Bill Gates ya había dejado la presidencia de Microsoft y trabajaba a tiempo completo en la fundación que tiene junto a su mujer, Melinda Gates. A través de esta organización, el matrimonio está centrado en erradicar las grandes epidemias que continúan cobrándose miles de vidas en África: la malaria, la tuberculosis y la poliomielitis.
En el caso particular de la polio, el trabajo de la Fundación sigue los mismos pasos que fueron llevados a cabo por Occidente hace décadas: implantar campañas de vacunación. Sin embargo, la inestabilidad en la que se ven inmersos países como el Congo o Nigeria motivó el diseño de un algoritmo capaz de predecir mejor momento para comenzar la campaña de vacunación, e incluso le advierte de posibles brotes de poliomielitis.
Además, en países como Senegal, ha puesto en marcha un sistema de retretes que funciona como pequeñas plantas de tratamiento de residuos fecales y que convierten el vapor de agua generado por la combustión de las heces en agua potable. Resultado: un mejor abastecimiento de agua potable, reduciendo de esta forma el número de enfermedades infecciosas contraídas por utilizar agua contaminada.
Tres medidas para frenar las muertes en Estados Unidos
La pandemia, ahora, no está en África, sino en los países occidentales. La Casa Blanca ha reconocido que probablemente mueran por coronavirus entre 100.000 y 240.000 estadounidenses y advierte que la cifra puede alcanzar los dos millones de no aplicar los esfuerzos de mitigación necesarios. Y es justamente en este punto donde entra el criterio de Gates.
Si en algo es experto el creador de Windows es en la optimización de recursos. De ahí que, ante la oleada de casos de Covid-19 en la que se encuentra inmerso Estados Unidos, haya decidido compartir su visión del problema. En un artículo publicado por The Washington Post aborda un plan de tres medidas que, a su juicio y tras consultar a expertos estadounidenses, ayudaría a frenar la escalada de muertes en su país.
El primer paso consistiría en bloquear todo el país y reducir el movimiento de los 374 millones de habitantes que viven en EEUU. Actualmente, las medidas de confinamiento difieren entre los diferentes estados debido a que no hay todavía ninguna orden nacional y hay zonas del país donde los restaurantes y las playas siguen abiertas. Gates sugiere que se prohíban los desplazamientos entre estados y que se paralicen las actividades comerciales de todo el país hasta que se reduzca el número de contagios hasta diez semanas.
En segundo lugar, considera esencial aumentar el número de test de Covid-19 y pide al Ejecutivo que intensifique la realización de pruebas para ver cuál es la situación real a la que se están enfrentando. En esta línea, invita a valorar iniciativas como la Red de Evaluación del Coronavirus de Seattle, llevada a cabo por Amazon Care (la parte de la compañía que proporciona atención médica a los empleados). Su objetivo poner a disposición de los estados la logística necesaria para que puedan realizarse los test de coronavirus en los hogares de los estadounidenses.
Gates asume que la demanda de pruebas es muy elevada y que los tiempos de análisis de resultados no juegan a su favor. Para ello, el país debe saber priorizar la prueba a unos colectivos frente a otros. El primer colectivo en esa lista debería estar encabezado por el personal sanitario debido a que son ellos quienes deben responder ante la enfermedad, después priorizaría a los pacientes con síntomas muy claros o que hayan estado expuestos.
Por último, Gates pide al gobierno de Trump que solo aporten información apoyada en resultados clínicos demostrados por científicos y que no alimente bulos como lo sucedido con la hidroxicloroquina. En su lugar, pide que la reserva federal concentre sus recursos económicos no solo en conseguir una vacuna, sino en poder fabricar miles de millones de dosis para proteger a los ciudadanos de todo el mundo cuando ésta sea hallada.
Imagen: YouTube/TED