Si abres tu frigorífico y ves que el agua de tus botellas para beber se ha helado o hay algo de escarcha en su interior, deberías comprobar una serie de detalles; muchas veces, este tipo de problemas se deben a un mal uso o malas costumbres con respecto a nuestro electrodoméstico.
Si tienes en cuenta las recomendaciones que te damos a continuación, no te hará falta llamar al Servicio Técnico por culpa de ninguna de las dos incidencias que, posiblemente, más preocupen a los usuarios de un frigo: la escarcha y las fugas de agua.
Comprobar la puerta
Aunque parezca algo totalmente evidente, el hecho de que no esté bien cerrada la puerta del frigorífico hará que este pierda temperatura y pueda comenzar a formar agua.
Siempre debes asegurarte de que la puerta está cerrada correctamente, de que nada está bloqueándola o que haya algo en el interior que quede tan justo, que acabe por abrirla por culpa de la presión.
Debes asegurarte de que la moldura de la puerta es funcional por todos sus lados y de que está en perfecto estado, sin grietas ni deformidades. Si esto ocurriera, aunque la puerta parezca cerrada, podrían estar produciéndose fugas.
Igualmente, la junta de goma de la puerta debe limpiarse regularmente, por lo menos cada seis meses, según aconseja Samsung.
¿Cómo inspeccionar la junta de goma de la puerta?
- Desenchufa el frigorífico y espera 2 minutos.
- Abre las puertas del frigorífico.
- Conecta al enchufe de corriente y cierra las puertas.
- Coloca tus dedos a lo largo de las juntas de goma. Si notas que entra aire por algún sitio, significa que hay que cambiarlas.
- Llegado ese caso, ponte en contacto con el Servicio Técnico de Samsung para que vengan a sustituirlas.
No introducir comida caliente en el frigorífico
No guardes comida caliente o recién cocinada en el frigorífico, siempre deja que los alimentos se enfríen fuera, para después colocarlos dentro. Este hecho puede provocar subida en el agua dentro de la nevera por evaporación.
Si lo metes en congelador se va a incrementar considerablemente la humedad y seguramente aparezca hielo.
La ventilación interna
Asegúrate de que las aberturas de ventilación que utiliza el sistema No-Frost de tu frigorífico no estén taponadas por elementos que hayas colocado dentro.
Nunca debes colocar alimentos frente a ellas, ya que, de lo contrario, se puede formar más humedad de lo normal, que puede acabar con agua debajo de los cajones e incluso hielo en la pared trasera interior.
Comprueba que no esté en Modo Vacaciones
Si ves que aparece condensación o gotas de agua, puedes comprobar si está el frigorífico en Modo Vacaciones.
Esta es una función que se puede poner cuando te vayas unos días de descanso para ahorrar energía en el frigo, pero que después debes acordarte de suprimirla, porque si no lo haces y lo llenas de alimentos, puede aparecer condensación y agua.
Para revisar que no está encendida esta función, asegúrate de que su icono en el panel se encuentra apagado. Si está encendido, realiza lo contrario de lo que hiciste para activar el Modo Vacaciones.
Separa los alimentos
La ventilación es algo clave para todo lo que supone la prevención contra agua y escarcha.
Dentro del frigorífico separa los alimentos y no los apoyes a la pared trasera para dejar espacio a la ventilación.
Asimismo, comprueba que los orificios de ventilación del refrigerador y del congelador no estén bloqueados.
Con todos estos detalles y consejos, seguro que tu frigorífico Samsung va a huir de dos de sus enemigos más feroces: las fugas de agua y la escarcha.
Imágenes | Samsung
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