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El alcalde de Arganda del Rey se niega a cumplir la ley: “No vamos a implantar una zona de bajas emisiones”

Alberto Escribano (PP) mantiene que la orografía del municipio madrileño de 60.000 habitantes impide instalar un área de tráfico restringido, pese a que el anterior Gobierno municipal ya tenía un estudio que demostró que era viable hacerlo

Alberto Escribano, alcalde de Arganda del Rey, junto a un mapa de la localidad, situado en su despacho del Ayuntamiento; en el mapa, la zona rosa son las viviendas y la gris, el polígono industrial.
Alberto Escribano, alcalde de Arganda del Rey, junto a un mapa de la localidad, situado en su despacho del Ayuntamiento; en el mapa, la zona rosa son las viviendas y la gris, el polígono industrial.Jaime Villanueva
Miguel Ángel Medina

Muchas de las 151 ciudades de más de 50.000 habitantes obligadas por ley en España a implantar una zona de bajas emisiones (ZBE) están retrasando su entrada en vigor (prevista para 2023). Otras siguen tramitándolas, aunque sea a regañadientes. Algunas han aprobado proyectos descafeinados para, al menos, cubrir el expediente. Arganda del Rey (Madrid, unos 60.000 habitantes) va más allá y se niega a cumplir la Ley de Cambio Climático. “No vamos a implantar una zona de bajas emisiones”, resume Alberto Escribano (PP), de 34 años y alcalde de la localidad madrileña desde hace uno. Defiende que no se puede, si bien el anterior Gobierno municipal, del PSOE, encargó un estudio que demostró que era viable hacerlo en la zona más céntrica. Arganda es el primer municipio abiertamente rebelde —aunque el regidor rechaza este calificativo— contra la norma estatal, que no cuenta con un régimen sancionador para las incumplidoras.

Pregunta. ¿Arganda del Rey va a tener una zona de bajas emisiones?

Respuesta. No, no la hemos implantado y no tenemos pensado implantarla. Por una razón: no vemos posible implantar una zona de bajas emisiones en un pueblo como Arganda del rey, que tiene 60.000 habitantes, pero donde su orografía lo hace imposible. Nosotros no tenemos avenidas, no tenemos calles principales, tenemos una calle que baja, que es la principal, por donde pasa todo el transporte público y otras dos, una en cada sentido, que bajan hacia el polígono industrial. No podemos desviar el tráfico por ninguna vía alternativa porque no las tenemos. El centro de Arganda sigue siendo un pueblo. Cuando la Unión Europea hizo esta directiva solo tuvo en cuenta el tamaño de las poblaciones, pero creo que no tiene sentido.

P. Pero el anterior equipo de gobierno, del PSOE, sí que tenía un proyecto de zona de bajas emisiones.

R. El anterior equipo dejó preparado un estudio que encargó, que nos costó 40.000 euros, pero que tampoco se atrevió a implantar, porque la zona de bajas emisiones tenía que haberse implantado el año pasado. Ellos, a pesar de ir en la misma línea política que el Gobierno de España, no lo hicieron. Además, el anterior alcalde quitó el estacionamiento regulado dos meses antes de las elecciones, y yo entiendo que una zona de bajas emisiones debe ir acompañada de un servicio de estacionamiento regulado. Nosotros vamos a volver a poner estacionamiento regulado.

Estudio para instalar una zona de bajas emisiones en Arganda del Rey, encargado por el anterior equipo municipal del PSOE.
Estudio para instalar una zona de bajas emisiones en Arganda del Rey, encargado por el anterior equipo municipal del PSOE.
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P. ¿No se podría hacer esa ZBE solo en el centro y con permisos para los residentes?

R. Tenemos una población de 60.000 habitantes y un polígono industrial que es más grande que el pueblo. A mí nadie me puede venir a decir que prohibir el tráfico en una parte pequeñita de calles estrechas va a arreglar la contaminación de toda la ciudad. Porque donde Arganda se contamina es en el polígono industrial, por el que pasan miles de camiones cada día, y ahí no se puede prohibir el tráfico. Sobre el papel, Bruselas puede tener toda la buena intención del mundo, pero sobre el terreno, en ciudades como la nuestra, es imposible. Y lo digo sin dogmatismo ni ideología.

P. No aprobar una zona de bajas emisiones es saltarse la ley. ¿Se considera un alcalde rebelde?

P. No, yo rebelde, no. Hemos hablado con el Defensor del Pueblo, que nos ha pedido información de por qué nosotros no queremos implantar la zona de bajas emisiones. Le hemos contestado con los datos que tenemos, con nuestra explicación, con documentos técnicos, con datos también de las estaciones de calidad del aire. Sí que tenemos información del Ministerio [para la Transición Ecológica], que nos trasladaron que iban a ser bastante permisivos, porque son conscientes de que esa ley no puede ser aplicada en todos los sitios por igual.

P. En la vecina Rivas sí que está ya vigente.

R. Rivas y Arganda somos dos ciudades que estamos pegadas y no podemos ser más diferentes. Rivas probablemente está preparada, es una ciudad hecha desde cero, totalmente llana. Nosotros somos una ciudad hecha en un barranco en la que no hay posibilidad, ni siquiera para las líneas de autobuses [...] Hay municipios que están haciendo zonas de bajas emisiones sin multas, que es como no hacer nada, más que perder el tiempo en trámites que no sirven para nada.

P. ¿No le preocupa la calidad del aire de sus vecinos?

R. Sí, claro que me preocupa, yo soy vecino de Arganda, pero no creo que el prohibir el tráfico en una parte muy pequeña de almendra central provoque ningún tipo de mejora en la calidad del aire. Le pasa también a otras ciudades, como Valdemoro, donde tienen que prohibir la circulación en el centro cuando están pegados a la A-4, que es donde de verdad se genera la contaminación. Las leyes están perfectas para aplicarse, pero la ley que se hace de una mesa y no se ha mirado antes donde tiene que ir aprobada no vale de nada.

Tráfico en una calle de Arganda del Rey, el pasado martes.
Tráfico en una calle de Arganda del Rey, el pasado martes. Jaime Villanueva

P. ¿Les han enviado algún requerimiento del Ministerio para la Transición Ecológica?

R. No, solo del Defensor del Pueblo. No hemos tenido más noticias. En Arganda sería imposible poner un servicio de bicicletas como Bicimad, porque estamos en las zonas más bajas [el municipio], pero si vas a la derecha o la izquierda te vas a encontrar cuestas y pendientes imposibles de transitar [Las bicis de Bicimad son eléctricas].

P. En cualquier caso, se están saltando la ley.

R. Nosotros cumplimos toda la ley, lo que no podemos es cumplir una ley que es imposible de cumplir. No he querido entrar nunca en ninguna pelea política, porque esto no es una pelea política. El año que viene tenemos que implantar la tasa de basuras, y yo estoy en contra, pero los técnicos lo harán porque es obligatorio y es posible hacerlo. Me viene a pelo porque también es otra cosa que viene desde la de la Unión Europea.

P. ¿Le pediría a otros municipios que no instalen su zona de bajas emisiones?

R. No, yo no tengo nada que pedir a ningún municipio. Yo lo que digo es que llevo viviendo en Arganda del Rey 34 años y sé cómo funciona. Antes de aprobar esa ley lo que tenían que haber hecho es la posibilidad de que haya excepciones porque no puede ser nunca igual para Toledo que para Madrid. Los objetivos que marca el Gobierno me pueden parecer loables, pero la forma de llevarlos a cabo no tiene ningún sentido.

P. Usted ha dicho: “Si no vienen a obligarnos, no lo vamos a hacer”

R. Hasta ahora, nadie nos lo ha dicho… Te puede chantajear de la forma que quieran, obviamente, porque tú dependes mucho de fondos. Si vienen y te dicen, o la pones [la ZBE] o incurres en un delito… Pero hasta ahora nadie se ha dirigido a nosotros. Tampoco el Ministerio para la Transición Ecológica nos ha pedido nada.

P. Transportes ha dicho que la futura ley de movilidad sostenible no va a financiar el transporte público de los municipios que no tengan ZBE.

R. No tengo información sobre eso, no le puedo decir.

P. ¿Teme denuncias por no aplicar la ley?

R. Entiendo que, si eso ocurre, eso será una decisión de alguien, pero a mí no me han trasladado nada ni hemos recibido ningún tipo de amenaza en ese sentido.

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Sobre la firma

Miguel Ángel Medina
Escribe sobre medio ambiente, movilidad -es un apasionado de la bicicleta-, consumo y urbanismo. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense, ha ganado los premios Pobre el que no cambia su mirada y Semana Española de la Movilidad Sostenible. Ha publicado el libro ‘Madrid, preguntas y respuestas. 75 historias para descubrir la capital’.
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