El Ryu Ga Gotoku vuelve a firmar una obra con carácter. En Lost Judgment encarnamos de nuevo al detective y abogado Takayuki Yagami en una de las mejores historias que ha creado el estudio. Descubre todo lo que esconde en nuestro análisis de Lost Judgment.
Cómo es esta industria que me sigue sorprendiendo cada año que pasa. A veces para bien, y a veces para mal. Que un juego en el que te dedicas a golpear a tus enemigos haciendo chilenas con bicicletas sea el más comprometido y valiente a la hora de tocar ciertos temas de la actualidad, es cuando menos curioso. Dice poco de otras obras y mucho de lo que el Ryu Ga Gotoku está aportando a nuestro medio. Ya lo comenté en el análisis del primer Judgment: el equipo que hasta hace poco ha sido capitaneado por Toshihiro Nagoshi es capaz de explorar las debilidades de nuestra sociedad moderna (y sobre todo de su país natal) y hablar de ello con humor y extravagancia.
Lost Judgment es ahora una mejor prueba de ello. El primer título tenía una historia que exploraba la idea de qué es la justicia, pero que aún tenía muchas reminiscencias de su pasado yakuza. Era también gracias a sus excéntricas misiones secundarias donde veías grandes conflictos del día a día de Japón. Pero con esta secuela, el estudio se ha puesto muy serio, firmando una trama principal interesante y con un misterio en el que apetece implicarse.
En esta ocasión, Yagami visitará Yokohama para investigar casos de acoso escolar que están ocurriendo en un instituto. A su vez, un hombre es encontrado culpable de acoso sexual; pero, en su juicio, se produce un giro de acontecimientos: el hombre afirma que se ha encontrado un cadáver de un profesor que acosó a su hijo, que se suicidó.
Lost Judgment no se anda con paños calientes. Quiere que mires al lado más crudo de nuestra sociedad, y pone además el ojo en el eslabón de la cadena que más tenemos que proteger. Aquí, los adolescentes son las víctimas, pero también los verdugos. Nadie es del todo inocente, porque, como sociedad en la que vivimos, somos responsables incluso de no hacer nada cuando vemos a alguien sufrir acoso. Más allá, incluso, el Ryu Ga Gotoku vuelve a utilizar como tema la justicia para cuestionarse la fragilidad de la ley, y si esta es realmente eficiente. Durante todo el juego, Lost Judgment quiere que te preguntes qué harías tú en el lugar de los protagonistas, cuál es tu sentido de la justicia y qué harías tú al darte cuenta de que no todo es blanco y negro y que el sistema no es perfecto.
Es una historia fabulosa. Una de las que más he disfrutado en este año. Todo está mezclado, evidentemente, con el alma del estudio, y eso implica también excentricidades y que a veces se distrae con algunas trifulcas callejeras para justificar los combates. En esta ocasión, presenciando el ocaso de una yakuza remanente y transformada en bandas callejeras. Importa menos porque el río narrativo siempre vuelve a su cauce original. La trama funciona. Los personajes están bien construidos. El misterio se sigue con interés y mantiene tu mente atenta para intentar anticiparte a la conclusión.
Hecha la ley, hecha la trampa
Claro que no sería un juego del Ryu Ga Gotoku sin su ortodoxa presentación. El Dragon Engine vuelve a recrear con gran fidelidad los distritos de Isezaki Ijincho y Kamurocho. En la versión de PS5 que he podido probar, el juego se mueve fluidamente y de forma casi idéntica a lo que ya fue la versión para nueva generación del anterior juego. En sus calles, encontraremos mil y una historias y actividades que hacer. Ya son viejas conocidas de todos: desde los recreativos clásicos, que en esta ocasión se incorpora una rareza como el Sonic Championship, un universo en el que Sonic y sus compañeros se enzarzan en peleas a lo Virtua Fighter. El protagonista de los juegos clásicos es, sin duda, la Master System, a la que podemos acceder desde nuestro despacho y cuenta con títulos como Alex Kidd, Fantasy Zone, Penguin Land, Quartet, Enduro Racer, Woody Pop, Maze Hunter 3D y Secret Command. No es quizá la mejor lista, pero es un comienzo.
Además de clásicas actividades como el mahjong, el pinball, el póker y el black jack entre otros, vuelve el minijuego de la realidad virtual, que en esta ocasión nos hará competir con rivales. En esta ocasión he dedicado menos tiempo a ellos, porque el título donde realmente se ha expandido es en el añadido de misiones secundarias. No solo habrá las clásicas esparcidas por la ciudad, sino que estará repleto de categorías: las que encontramos en la oficina, las que buscamos a través de una app en nuestro móvil que rastrea palabras clave, sacando a pasear a un gracioso perro detective, y la estrella del juego, las Historias Escolares; una serie de investigaciones que llevaremos a cabo como tutor del Club Resuelvemisterios en el instituto.
Seguiremos haciendo locas persecuciones y examinando escenas en primera persona
De hecho, Lost Judgment aprovecha todo este contenido secundario para incidir más en algunas de las mecánicas de detective del anterior juego, como espiar y tomar fotos, por ejemplo. La historia principal añade algunas nuevas, como pequeñas escenas de sigilo o la habilidad de escalar por algunas fachadas. También artilugios, como un detector de frecuencias, un amplificador sonoro, etc, pero creo que es consciente de que estas mecánicas pueden romper el ritmo de la trama y prefiere relegarlas al contenido secundario. Sí, seguiremos haciendo las locas persecuciones de vez en cuando y examinando escenas en primera persona, pero pretenden interrumpir menos la narración.
Lo que no interrumpe nunca es el combate. El de Judgment ya llevaba las clásicas peleas de Yakuza a un nivel más loco y acrobático. El estilo de pelea de Yagami se dividía en tigre, para los golpes fuertes, y grulla, para las multitudes. Aquí se le suma el estilo serpiente, que se convierte rápidamente en tu favorito. Un estilo derivado del aikido, muy efectivo contra enemigos con armas, que tiene unas animaciones espectaculares, llenas de llaves y golpes elegantes; además de ser el mejor para esquivar golpes y contraatacar.
Sigue teniendo algunos momentos frustrantes, como cuando nos tiran al suelo y perdemos el ritmo del combate. La animación de Yagami cayendo es infernalmente lenta. Poco a poco, y sobre todo si completamos misiones secundarias, iremos desarrollando el árbol de habilidades que nos permitirán aumentar nuestra vida, repertorio de golpes y movimientos y nos harán las cosas más fáciles. En general, no tendrás mucho problema contra los enemigos normales, pero algunos jefes ponen las cosas serias y tendrás que prestar más atención, no solo aporrear el botón.
Lost Judgment, como muchos juegos del estudio, me ha vuelto a sorprender
Con todo, no vas a querer perderte el amplio contenido secundario del juego que mencionaba antes. Sus misiones son muy locas y divertidas, pero también las hay bien desarrolladas. Las historias escolares son la mejor prueba de ello, con su menú especial y centrado en conocer a distintos grupos del instituto. El primero, el de baile, nos hará disfrutar de las clásicas escenas rítmicas ya conocidas; pero esto será el principio para desvelar un misterio común alrededor de una leyenda urbana conocida como El Profesor.
Lost Judgment, como muchos juegos del estudio, me ha vuelto a sorprender. Sí, es cierto que en su fuero interno sigue reaprovechando material de sus anteriores trabajos, pero es su forma de alcanzar nuevas cotas. En este caso, las mejoras son sobre todo narrativas. Su historia tiene mucha, mucha fuerza. No solo es interesante, sino que toca temas con valentía. Más allá de la trama principal, incluso, toda la red que teje de historias secundarias ha alcanzado un nuevo colofón y muchas de ellas son interesantes, divertidas, locas o todas a la vez. No sé cómo será el futuro del estudio ahora que Nagoshi abandona el Ryu Ga Gotoku, pero no hay duda que el listón ha quedado alto.
Lost Judgment es un juego muy especial. Su trama principal no solo es interesante, con un misterio detectivesco en el que te querrás implicar, sino que además es comprometido en los temas que toca. Su exploración del acoso escolar desde muchos ángulos y la fragilidad de las leyes y el sistema judicial es todo un ejemplo de valentía. Aparte de ello, la cantidad de misiones secundarias que añade, destacando las nuevas historias escolares, multiplican su duración. Su combate se ha refinado con un nuevo estilo y, por supuesto, vuelven todas las actividades clásicas con un puñado de novedades. Una de las mejores historias que he vivido este año.
Comprar Lost Judgment- Una de las mejores historias que he disfrutado este año.
- Se atreve a tocar temas importantes como el acoso escolar y la fragilidad de la ley.
- El combate es divertido y añade un nuevo estilo, aunque a veces es impreciso.
- Enorme cantidad de misiones secundarias de todo tipo, con especial cuidado de las nuevas Historias Escolares.
- Repleto de actividades y minijuegos como de costumbre. Destacan los nuevos juegos clásicos de Master System.