Neutralidad de la Red
La neutralidad de la red es el principio de que los paquetes de datos en internet deben moverse de manera imparcial, sin importar el contenido, el destino o la fuente. El término se originó en un artículo escrito por el profesor de la Facultad de Derecho de Columbia, Tim Wu, en 2003, titulado "Neutralidad de la Red, Discriminación de Banda Ancha".
En los Estados Unidos, el debate sobre la neutralidad de la red se centra en la cuestión de la regulación gubernamental y si el acceso a internet debe clasificarse legalmente como un servicio opcional o una utilidad pública. Si los proveedores de servicios de Internet (ISP) en los EE.UU. brindan servicios de información, están sujetos al Título I de la Ley de Comunicaciones de 1934 y están regulados por la Comisión Federal de Comercio (FTC). Sin embargo, si proporcionan un servicio público, se incluyen en el Título II de la Ley de Comunicaciones de 1934 y están regulados por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC).
Durante gran parte de la historia de internet, las empresas que proporcionaban acceso a internet de banda ancha se clasificaron como servicios de información y fueron supervisadas por la FTC. En 2010, bajo la administración de Obama, la Comisión Federal de Comunicaciones dictaminó que los proveedores de internet de banda ancha eran operadores comunes y, como tales, estarían regulados por el Título II.
Este cambio en la clasificación otorgó a la FCC el poder legal para prohibir que los proveedores de internet de banda ancha ralenticen o bloqueen la entrega de contenido de internet a los consumidores. También prohibió a los proveedores de banda ancha priorizar el tráfico de los proveedores de borde que están dispuestos a pagar tarifas más altas para una entrega más rápida, una práctica conocida como calificación cero. El fallo fue impugnado en el sistema judicial, pero se mantuvo.
En junio de 2018, bajo una nueva administración presidencial, la FCC revocó su decisión y ordenó que el servicio de acceso a internet de banda ancha regresara a su clasificación de Título I. La razón oficial de la reclasificación es "eliminar la onerosa regulación que sofoca la innovación y disuade la inversión y permite a los estadounidenses elegir el servicio de acceso a internet de banda ancha que mejor se adapte a sus necesidades". La nueva orden, que se titula "Restauración de la Libertad en Internet", promueve la transparencia bajo las actuales leyes antimonopolio y de protección al consumidor.
Debate sobre la neutralidad de la red
Los ISP, incluidos AT&T, Comcast, Time Warner y Verizon, favorecen un modelo de servicio de internet de dos niveles que permite una calificación cero y les permite cobrar una tarifa superior por la ubicación prioritaria y una velocidad más rápida en las tuberías de la red de su operador. Sostienen que la legislación gubernamental de internet es una barrera innecesaria para la innovación y el crecimiento económico.
Los defensores de un modelo de dos niveles señalan que el modelo ya existe porque los consumidores ya tienen la opción de utilizar un servicio de internet por discado más lento o pagar un precio superior por una velocidad más rápida en banda ancha (cable coaxial, DSL o servicios de fibra óptica). También señalan que los ISP ya priorizan parte del tráfico sobre otro tráfico para mantener la calidad de servicio (QoS).