El gobierno de Collboni propone incrementar la tasa de residuos entre 5 y 10 euros anuales

A cinco días de someterse a su aprobación inicial en la comisión de Economía, el gobierno de Jaume Collboni ha presentado su propuesta de ordenanzas fiscales para 2025. Como viene siendo habitual, esta suele ser la primera negociación del curso político a la que se somete el ejecutivo, que buscará tener la luz verde para tramitar las tasas que aplicará el año que viene. Su idea pasa por incrementar la tasa de residuos (que se cobra en el recibo del agua) entre 5 y 10 euros anuales, según la categoría de comprador, e ir subiendo las tarifas de manera progresiva en tres años. También aumentar el IBI a hoteles de mayor valor catastral y al que cobra a las terminales de cruceros y a otros emplazamientos del Port de Barcelona.

"Son unas ordenanzas que no incrementan la fisclidad a los barceloneses, excepto la regulación de la tasa de residuos", ha destacado el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, durante la presentación en rueda de prensa este viernes. Así, serán unas tasas más centradas en incremetar la presión al sector turístico y en aligerar la de los vecinos. El gobierno calcula que su propuesta permitirá ingresar a las arcas municipales 22,6 millones de euros más que en 2024.

La subida en la tasa de residuos se adapta a la entrada en vigor de la ley 7/2022, que determina la existencia de una tasa no deficitaria que cubra la totalidad de los costes de prestación del servicio. Por eso la necesidad de incrementar las tarifas responde a la nueva contrata de recogida de residuos vigente y para dar cumplimiento a la obligatoriedad de disponer de esta tasa específica.

Afectará a las tarifas más habituales, que representan el 72,7% de los hogares. En concreto, los que pagan 27,65 euros, el año que viene pagarán 32,91 euros, y los recibos de 51,38 euros subirán a 61,15 euros anuales.

208 hoteles con mayor valor catastral

Respecto a la subida del IBI a hoteles con mayor catastral, el gobierno plantea aplicar un incremento del 1 al 1,08% a los inmuebles con dicho valor superior a los 2,5 millones de euros. Contempla 233 bienes inmuebles de ocio y hosteleria, de los cuales 208 son hoteles.

También propone aplicar un incremento progresivo de 0,80% hasta el 1,30% (el máximo permitido) hasta 2027 a los bienes inmuebles de características especiales, ubicados básicamente en el Port de Barcelona. Se aplicaría a 130 inmuebles, que se encuentran bajo el epígrafe BICES, que reúne bienes com el puerto comercial, terminales de cruceros, túneles de peajes o infraestructuras como la regasificadora.

En el marco de la nueva regulación de autocares turísticos, se prevé una nueva tasa diaria obligatoria de 35 euros para poder usar la Zona Bus y un permiso, también diario, de reserva previa de entorno singular si quieren parar en zonas de más afluencia, con un coste de 3 euros por cada operación. El objetivo es reducir el impacto que tienen los autocares turísticos en ciertas zonas de la ciudad.

En conversaciones con BComú y ERC

El gobierno ha negociado por ahora estas ordenanzas con BComú y ERC, según ha detallado Valls, que de momento no quiere prefijar que "haya una posición de sí" para lograr los apoyos suficientes que permitan tramitarlas el miércoles, e insiste en la fragmentación política, que puede dificultar llegar a mayorías. De conseguir el apoyo de los Comuns y los republicanos, podrían tramitarlas con un holgado apoyo de 24 concejales.

Su propuesta ya incluye la iniciativa de los Comuns de aumentar el IBI a los hoteles de mayor catastral y, sobre el hecho de doblar el precio de la entrada al Park Güell a turistas (de 10 a 20 euros), el teniente de alcalde se ha abierto a trasladarla al consejo de administración para evaluarla.

También ve positiva el planteamiento de ERC para subir el recargo municipal de la tasa turística de 4 a 8 euros, una propuesta que primero debe pasar por el Parlament. "Queremos más margen fiscal y apoyaremos esta propuesta en el Parlament". Aun así, ha dicho que deben valorar en qué momento aplican el recargo y la opción de aplicarlo de forma estacional, según sea temporada alta o baja. Un debate que insiste en abrir.

Junts no las apoyará

Junts ha avisado en un comunicado emitido después de la rueda de prensa de que no apoyará la propuesta del gobierno. Para el grupo municipal, “son unas ordenanzas que aumentan la presión fiscal sobre el conjunto de la ciudadanía”. “No es ninguna sorpresa, son las del tripartito, las del acuerdo ya cerrado con Comuns y ERC sobre el presupuesto municipal del año que viene”, ha criticado, a la vez que ha reprochado al gobierno no haber buscado el apoyo de Junts, “ni ha negociado nada”.

Negociaciones paralelas

La tramitación de las ordenanzas fiscales ha coincidido en un momento en el que han convergido distintas negociaciones. Más allá de los presupuestos, la principal ha sido la de la negociación para empezar a tramitar la modificación de la norma del 30% a vivienda asequible, que el gobierno ha aplazado al año que viene. Valls ha precisado que no hay "ningún tipo de interferencia" entre ambas.

"A menudo hay un alto grado de coincidencia, pero a veces no estamos de acuerdo con las soluciones e intentamos buscar también acuerdos generales con otros. Nos tenemos que ir acostumbrado a esta realidad", que para él es fruto de la fragmentación política. Por ahora, el gobierno está centrado en las ordenanzas y dice que los otros temas ya llegarán y ya se discutirán. "Ya veremos en ese momento qué decisiones tomamos".