Por más avances que realiza la industria del videojuego en materia de hardware, lo que se traduce en un mejor audio, más fotogramas por segundo y una calidad gráfica cada vez más atractiva, el almacenamiento sigue siendo un problema para muchos usuarios.
Las consolas de última generación de Microsoft y Sony dieron un paso adelante en este sentido, dotando a sus lanzamientos más recientes de unidades SSD ultrarrápidas. Lo que se traduce en unos tiempos de carga de infarto y cambios entre juegos prácticamente instantáneos. De hecho, esta fue una de las innovaciones más celebradas por parte de la comunidad gamer.
Esto ya estaba presente en el terreno del PC gaming, donde tenemos a nuestro alcance un amplio abanico de alternativas de almacenamiento SSD. Y además en diferentes formatos: SSD SATA, SSD M.2 SATA y SSD M.2 NVMe, los mejores de todos.
Pero los pasos hacia adelante que ha dado el sector del hardware gaming en velocidad de lectura y escritura de datos, los cuales son muy de agradecer, por otra parte siguen estancados cuando hablamos de espacio disponible en el que instalar unos juegos que cada vez son más y más demandantes de almacenamiento; las consolas y la mayoría de equipos portátiles y de sobremesa premontados del mercado suelen recortar en GB, teniendo nosotros que ampliarlo a posteriori con el consiguiente desembolso extra.
Lo positivo de esto es que podemos hacerlo de múltiples maneras, dependiendo de las necesidades y presupuestos de cada cual. Si necesitamos mucho espacio pero contamos con poco presupuesto, los HDD externos son la opción ideal; a cambio de unas pocas decenas de euros conseguimos muchos GB, e incluso varios TB, a cambio de una pérdida notable de velocidad. Pero si, en cambio, priorizamos esta última, nos merece la pena gastar algo más y no necesitamos tantísimo espacio en el que alojar nuestros juegos, un SSD externo es lo mejor.
Así, si nos encontramos en esta tesitura y queremos hacernos con un SSD externo con el que ampliar el espacio de base de nuestra consola PlayStation, Xbox, PC o portátil gaming, debemos tener en cuenta algunos aspectos para acertar con la compra lo máximo posible. De modo que a continuación vamos a repasar dichos aspectos, y a continuación recopilaremos algunos de los modelos más interesantes del mercado en estos momentos.
Índice de Contenidos (3)
Nuestra selección de SSD externos para consolas y PC
- Seagate Basic 1 TB, un modelo compatible con todas las plataformas
- WD_BLACK D30 1 TB, un disco duro pensado para jugadores de Xbox
- WD My Passport 1 TB, un modelo que destaca por su transportabilidad
- Crucial X9 2 TB, un SSD externo con mucho espacio disponible
- SanDisk Extreme 2 TB, un modelo NVMe portátil de gran capacidad
- Samsung T7 2 TB, uno de los mejores SSD externos que podemos encontrar
SSD externos para consolas y PC: aspectos a tener en cuenta
- SSD externo vs. HDD externo. Como decimos, en cuanto a almacenamiento externo con el que ampliar el espacio de nuestras consolas y equipos gaming encontramos dos alternativas principales: HDD y SSD. Los primeros, discos duros mecánicos tradicionales, tienen piezas físicas y móviles, y resultan más económicos ofreciendo una gran cantidad de espacio. Por contra, sus velocidades están a años luz de los SSD. Estos otros son similares a los SSD internos que encierran las consolas de última generación y los PC y portátiles gaming. Pero a diferencia de ellos, podemos conectarlos y desconectarlos externamente a todos estos dispositivos mediante cable. Lo que permite que podamos llevarlos con nosotros encima siempre que queramos de manera cómoda.
- Compatibilidad con las diferentes plataformas de juegos. Por otra parte, antes de hacernos con un SSD externo debemos fijarnos en que sea o no compatible con nuestro dispositivo de juegos. Cuando hablamos de PC, la cuestión se simplifica bastante, ya que estas unidades de almacenamiento son perfectamente compatibles con cualquier ordenador o portátil. Sin embargo, en lo que respecta a las consolas hay que prestar una mayor atención a si podremos usar nuestra adquisición sin mayores inconvenientes. Aun así, no tendremos problemas con las principales consolas de sobremesa del mercado, tanto de la generación que acabamos de estrenar como de las anteriores; en la mayoría de los casos basta con enchufar el SSD, formatearlo en la propia consola en el formato adecuado y poco más. Eso sí, los SSD externos que no sean NVMe M.2 y PCIe 4.0 no son compatibles con los juegos de actual generación en PS5 o Xbox Series X.
- Conectividad. Los discos duros internos, ya sean mecánicos o de estado sólido, se conectan a los equipos gaming de diferentes maneras: mediante cable SATA, directamente en la placa base... Pero estamos hablando de dispositivos externos, por lo que su conexión pasa por diferentes tipos de cables. Lo más común es que veamos USB, tanto tipo A (más antiguo) como tipo C. Respecto a los primeros, no tendremos problemas con ninguna consola ni en PC. No obstante, cuando hablamos del USB tipo C la cosa cambia ya que no todas las plataformas lo admiten. Este es otro aspecto en el que prestar especial atención aunque lo positivo es que la prácticamente todos los SSD externos incorporan cables o adaptadores de ambos protocolos. Y sino, por unos pocos euros siempre podemos hacernos con uno de estos a mayores.
- Almacenamiento disponible. Sin duda, el aspecto en el que más flaquean los SSD externos es en la cantidad de espacio. Y no porque no encontremos unidades con grandes capacidades, sino porque resultan bastante caras según subimos de tamaño. Al igual que como con los HDD mecánicos, hay SSD que van desde los pocos cientos de GB hasta más de 1 TB, siendo estos últimos más que suficientes para instalar decenas de juego y actualizaciones. Pero la relación entre GB y euros es más alta cuando hablamos de estas unidades de almacenamiento.
- Precio. Finalmente, relacionado con lo anterior llegamos al "factor precio". Aquí depende en gran medida del presupuesto de cada cual y también de sus necesidades; si queremos instalar apenas un par de juegos nos bastará con los SSD más pequeños y, por tanto, más económicos. Pero si vamos a por modelos que ronden e incluso superen el TB de espacio, el coste asciende considerablemente. Eso sí, una vez contamos con 2 TB o más prácticamente nos podemos olvidar de los problemas de espacio de cara al futuro.
SSD externos: modelos recomendados
Seagate One Touch
A pesar de que los SSD resultan más caros que los HDD, como decimos, también encontramos modelos relativamente asequibles para quienes necesiten mucha velocidad sin gastar demasiado. Este Seagate Basic, por 50,25 euros es un buen ejemplo. Cuenta con 1 TB de capacidad y un factor de forma de 2,5 pulgadas, similar al de los HDD externos más extendidos. Emplea el USB 3.2 en formato tipo A y está disponible en negro.
Seagate Basic portátil, 1 TB, Disco duro externo, HDD, USB 3.0 para PC, ordenador portátil (STJL1000400)
WD_BLACK D30
De la conocida firma Western Digital, que cuenta en su catálogo con soluciones de almacenamiento de todo tipo, tanto externas como internas, tenemos este "pata negra" (nunca mejor dicho) de la familia Black; la de mejores prestaciones de las varias que tiene. Tiene un precio de 89,96 euros y, como el anterior modelo, es de 1 TB. Es realmente pequeño y está especialmente pensado para usarse en consolas Xbox.
WD_BLACK 1TB D30 Game Drive SSD para Xbox Memoria de estado sólido externa hasta 900 MB/s con un mes de Xbox Game Pass compatible con Xbox y PC
WD My Passport SSD
Quien necesite más espacio y 500 GB se le queden cortos para sus juegos tiene en este otro Western Digital una buena opción de compra. En este caso pertenece a la gama My Passport, que se caracteriza por contar con dispositivos cómodos de llevar siempre con nosotros, y tiene un precio de 103,00 euros. También está disponible en varios colores y es muy pequeño.
WD My Passport 1TB SSD Externo Portátil, Disco duro externo SSD con velodidad de lectura de hasta 1050 MB/s 1000 MB/s de escritura, Funciona con PC, Xbox y Playstation, Azul medianoche
Crucial X9 2 TB
A un precio ligeramente superior de 167,97 euros encontramos esta alternativa de otro fabricante, como es Crucial, también bastante conocido dentro del sector de las unidades de almacenamiento. Este SSD X9 supera la cantidad de espacio del anterior modelo, 2 TB, en los que nos caben decenas de juegos. Es compatible con todo tipo de sistemas de juegos y se puede conectar mediante un puerto USB tipo C.
Crucial Disco Duro Micron CT2000X9SSD9 2 TB SSD
SanDisk Extreme SSD
En formato NVMe, con unas excelentes valoraciones por parte de los consumidores e incluso el sello 'Amazon's Choice', que siempre es garantía de éxito de ventas, se encuentra el SanDisk Extreme. Tiene un precio de 149,99 euros, una capacidad de 2 TB, un diseño muy particular y robusto (incluso resistente al agua y al polvo) y también se puede usar a través de USB tipo A o C, gracias al adaptador que incorpora.
SanDisk 2TB Extreme SSD portátil, USB-C USB 3.2 Gen 2, Memoria de estado sólido NVMe externa, hasta 1050 MB/s, Clasificación IP65 de resistencia al agua y al polvo
Samsung T7
Por último, y como no podía ser de otra manera, encontramos un modelo de Samsung que también cuenta con unas excelentes valoraciones. Se trata del Samsung T7 de 2 TB de espacio y tiene un precio de 159,95 euros. Es compatible con multitud de plataformas, está disponible en varios colores y es ideal para quien necesite ambas cosas: alta velocidad de lectura y escritura de datos y espacio de sobra en el que no tener problemas de instalación de juegos o actualizaciones nunca más.
Samsung T7 Portable SSD Indigo-blue 2 TB
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