El verano no es solo un buen momento para disfrutar de la playa y la piscina, si no que también puede ser ideal para pasar tiempo en la montaña. Existen infinidad de rutas de senderismo que podemos practicar en verano. Por ello en este post vamos a dar algunos consejos para disfrutar de esta actividad de manera segura y satisfactoria.
La montaña es un buen lugar para huir del ruido y del estrés de las ciudades, y sobre todo, en verano, es un buen momento para evadirnos del calor y disfrutar de la naturaleza. Además, es una buena manera de hacer deporte mientras disfrutamos de nuestro tiempo libre y nos divertimos. Pero al estar en un medio salvaje, debemos tener en cuenta una serie de puntos para evitar sustos innecesarios.
Beneficios de caminar
Antes de nada, vamos a destacar los beneficios de caminar, y más en la naturaleza, ya que el aire es mucho más fresco y limpio, y por ello es un buen lugar para realizar cualquier tipo de actividad.
Al estar realizando ejercicio en aire más puro, la respiración y la oxigenación del cuerpo mientras hacemos ejercicio es mucho mejor que si lo practicamos en la ciudad. Por ello el rendimiento y la sensación de bienestar que vamos a conseguir será mucho mejor.
No olvidemos que el contacto directo con la naturaleza es un revulsivo para mantenernos más relajados y evadir así el estrés del día a día. Por ello es un buen lugar para pasar las vacaciones, y poder así hacer senderismo y rutas por la montaña.
Pero la montaña es un lugar que a veces puede resultar un tanto peligroso, ya que no es un entorno con el que estemos familiarizados. Por ello es bueno que antes de salir a este entorno lo tengamos bien programado todo. Nosotros en esta ocasión queremos dar algunos consejos para conseguirlo de la mejor manera posible y así divertirnos, y no hacer de una jornada de ocio algo negativo.
Existen infinidad de rutas y lugares en los que podemos llevar a cabo el senderismo. Todos estos lugares disponen de rutas definidas y pensadas para que la actividad que vamos a llevar a cabo sea lo más satisfactoria posible. Pero esto no quita para que planifiquemos bien cada una de esas salidas que vamos a realizar en nuestras vacaciones.
Delimitar y planificar la ruta de antemano
Por este motivo es muy bueno poder planificar todo a la perfección. En primer lugar, lo que debemos hacer es delimitar la ruta que vamos a realizar. Elegir el lugar en el que vamos a realizar el senderismo es esencial, y por ello debemos analizar el entorno, el tiempo que se tarda en realizar la ruta, qué tipo de ruta es, si es bueno para todo tipo de persona…
Existen infinidad de páginas y foros en los que las personas que ya han realizado esta y otras rutas han dejado información acerca de la ruta, de los lugares que debemos visitar… Por ello es muy bueno que antes de lanzarnos a practicar esta ruta, veamos lo que otros nos cuentan y así poder hacernos una idea de lo que vamos a elegir.
Saber la ruta con antelación, nos servirá para decantarnos por un lugar u otro en el que vamos a llevar a cabo el senderismo. Por eso la primera medida que vamos a tomar es informarnos de las rutas y elegir el entorno y el lugar que mejor nos convenga para ejecutar esta actividad.
Determinar el tiempo que dura la ruta, los puntos de interés y la dificultad de la misma
En segundo lugar, y al hilo de la planificación del lugar, vamos a detenernos en el tiempo que dura la ruta. No siempre tenemos todo el tiempo del mundo para llevar a cabo una ruta de senderismo. Por este motivo existen infinidad de opciones a nuestro alcance. Informarnos de la duración de la misma es necesario antes de salir a caminar.
Además del tiempo de duración de la ruta, los puntos de interés de la misma son algo que debemos tener en cuenta. Hay rutas en las que nos encontramos miradores, lugares de interés natural y arqueológico… Por ello es bueno que lo sepamos de antemano, para saber hacia dónde vamos, y poder disfrutar al máximo de la ruta.
También es bueno que sepamos de antemano la dificultad de la ruta, ya que no todos los senderos son iguales. Existen algunos que tienen más subidas, más obstáculos como ríos, pendientes… Por ello es bueno que antes de acudir a una ruta lo sepamos, para así elegir bien lo que queremos conseguir con la ruta que vamos a llevar a cabo.
Prestar atención al clima y las horas de más sol
Tener en cuenta el clima que va a hacer durante la jornada de senderismo es fundamental. No solo para saber lo que nos podemos encontrar, si no para equiparnos adecuadamente con el atuendo y los materiales necesarios para combatir el clima. No olvidemos que el bosque es un entrono con el que no estamos familiarizados y por ello lo debemos tener siempre presente.
El mismo cuidado debemos tener con las horas de sol. Sobre todo en verano, que los días son más largos y más calurosos, tenemos más tiempo para realizar senderismo, pero debemos evitar las horas centrales del día, que son las más peligrosas por el calor que hace. Para ello debemos decantarnos por rutas que se realicen por la tarde o por la mañana.
Es fundamental que no nos pille la noche en medio de una ruta, ya que podemos perdernos si no conocemos bien el entorno. Por ello los cálculos de tiempo antes de salir son necesarios, y saber el ritmo que solemos llevar caminando, para así poder calcular bien lo que podemos tardar en realizar una ruta de manera convencional.
No olvidemos que todas las rutas de senderismo suelen estar provistas de balizas y señales que marcan el camino que debemos seguir. Por ello es bueno que también conozcamos todas las señales que nos vamos a encontrar. De manera convencional, las rutas de senderismo están marcadas con colores. Por ello es bueno que sepamos el color de nuestra ruta y sigamos las indicaciones que se corresponden con éste.
El equipamiento es esencial
La planificación es fundamental, pero además de esto, el equipamiento debe ser algo imprescindible cuando vamos a hacer senderismo. Por ello es necesario que, al hilo de lo que hemos dicho antes, sepamos el tipo de ropa que vamos a llevar. La montaña es un lugar en el que el clima varía mucho, y pude hacer desde calor hasta lluvia, frío… independientemente de que sea verano.
Lo que recomendamos es utilizar ropa transpirante, cómoda, poco pesada, y que nos permita manipularla con facilidad. Un buen truco es vestirnos con capas diferentes. Camisetas, chaquetas con cremallera… Son buenas alternativas, así como pantalones desmontables que pueden ser largos y cortos en cualquier momento del día.
La importancia de la mochila
Una mochila es fundamental en nuestro equipamiento, ya que nos servirá para meter la ropa y todo lo que llevemos con nosotros. Debe ser ligera y que no nos moleste demasiado en la ruta. Además, es bueno que esté provista de diferentes bolsillos que nos permitan guardar utensilios que es aconsejable llevar con nosotros.
Botella de agua que no falte
Entre estos utensilios vamos a destacar una botella de agua que nos mantenga hidratados durante toda la ruta. Ahora en verano, una crema protectora solar es fundamental para evitar quemarnos la piel. Una brújula es muy útil, ya que aunque la ruta esté fijada, podemos desorientarnos, y nos ayudará a recuperar la ruta con facilidad.
El canzado adecuado
No olvidemos que el calzado es fundamental para que la actividad sea satisfactoria. Un calzado cómodo, que no sea pesado, que deje que los pies transpiren, que además, nos mantenga el pie sujeto, es fundamental. De este modo, lo que conseguiremos será mantener los pies en perfecto estado, y ejecutar una pisada perfecta, evitando daños colaterales en las articulaciones que la componen.
Estas son algunas de las medidas que debemos tomar a la hora de salir a practicar senderismo, pero además, hay alguno puntos en los que es necesario tener cuidado. Se trata de algunas recomendaciones sencillas que harán que la experiencia sea aún mejor.
No salirnos de la ruta marcada es esencial, pues como hemos dicho, estamos en medio del bosque, un lugar que no es familiar para nosotros. Las rutas marcadas son seguras y fiables, y el senderismo es un deporte lúdico, no de riesgo. Si queremos ir campo a través, lo que debemos hacer es trekking.
Acudir con comida y bebida a la ruta es bueno, ya que no sabemos lo que a veces se puede alargar, y tener provisiones nos ayudará a tener siempre fuerzas y poder realizar el recorrido de manera perfecta.
Con todos estos puntos, ya estamos listos para elegir la montaña como destino este verano, y así conseguir refrescarnos en plena naturaleza. Es una buena alternativa a la tradicional playa. Por ello, desde Vitónica recomendamos la montaña y realizar rutas de senderismo, que nos mantendrán activos en vacaciones, mientras nos divertimos.
Imágenes | Pexels / Unsplash
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